Cada año por estas fechas, solemos realizar un recuento y recapitulación del año transcurrido, y nos plantemos toda una serie de metas a corto y largo plazo para el nuevo año. Un grupo de estos nuevos proyectos son las tan famosas promesas. Quién no ha dicho la famosa frase “… a partir de este principio de año …”, “empezaré a …. (cuidarme, hacer ejercicio, tomarme la vida con más filosofía, etc.)”, “dejaré de … (fumar, beber alcohol, comer tanto, comer tan mal, etc.)”. Estas promesas suelen realizarse año tras año, y durante las primeras tres semanas incluso puede que se cumplan con ilusión y ganas. Pero transcurrido un mes y medio ya nadie tiene ganas de proseguir, y todas estas promesas cargadas de buena intención se transforman en unas postergadas futuras promesas para el año siguiente.
Pero de entre todas ellas, tendríamos que persistir en especial en aquellas que nos hagan sentir mejor; y para sentirnos mejor, uno de los pilares es nuestra salud. Recordemos que es uno de los mayores tesoros que tenemos. Por ello, es importante cuidarla porque en función de cómo la tratemos, nuestra esperanza de vida y calidad será mayor o menor. Dos de los principales pilares para nuestra salud son la Alimentación y el Deporte o Actividad Física. Estos elementos son de vital importancia, y cierto es que las personas comen cada vez peor y son más sedentarias. Sería muy interesante que una de las primeras promesas reales para este año fuera mejorar nuestra alimentación. Sin complicar mucho el tema, enfocaría los esfuerzos a retomar nuestra Dieta Mediterránea. De todos es sabido que cada vez estamos comiendo más a la americana y solamente hay que observar su forma de alimentación, así como el tipo y tasa de enfermedades que padecen la mayoría de habitantes de ese país. Aunque existen muchos tipos de dieta, la mediterránea tendría que ser la base. Existen numerosos libros que hablan de ella, pero a modo de resumen se puede decir que está caracterizada por su abundancia en frutas, verduras y hortalizas (frescas y del tiempo) que deben tomarse diariamente, pescado de forma habitual (dar mucha importancia al azul), carnes de calidad pero sin abusar (limitando el consumo de carne roja), buenos caldos y sopas (naturales y no prefabricados o preparadas), cereales y pastas (a poder ser integrales, como las que se tomaban hace décadas), legumbres semanalmente y huevos de calidad. Para seguir esta dieta, hay que limitar al máximo la pastelería – bollería especialmente la industrial, los refrescos azucarados, los alcoholes destilados, la charcutería de nueva generación, los precocinados, y el exceso de enlatados y congelados. Como bebida básica agua, infusiones y zumos de fruta y hortalizas. Como excepción vino tinto (de calidad) y cerveza. Estas dos bebidas son muy mediterráneas y aunque se ha observado (a través de numerosos experimentos) que tienen interesante propiedades hay que evitar los excesos. Y lógicamente, hay que vigilar la cantidad que se come. Es tan importante tener en cuenta la cantidad como la calidad de lo que se come. Por otro lado, practicar una actividad física es primordial para mantener un buen estado físico y psicológico. Realizar ejercicio de forma habitual activa todo el organismo, lo equilibra y refuerza el sistema cardiorrespiratorio, inmunitario, osteomuscular, neuroendocrino y psicoemocional. El sedentarismo es uno de los factores de riesgos más importantes para predisponer a un gran número de enfermedades, o a hacer que evolucionen negativamente en caso de padecer ya alguna patología. El ejercicio se puede adaptar a cualquier condición física y edad, por lo que no hay excusas para no practicarlo. Se ha observado que las personas que lo realizan ininterrumpidamente durante años, y de una forma correcta claro está, están también mucho más sanos, ágiles, y en forma en la tercera edad que los que no lo han realizado. Este hecho nos tendría que hacer reflexionar. El ejercicio no quiere decir que nos tengamos que encerrar en un gimnasio a “machacar” abdominales o bíceps. La actividad física tiene que aportar diversión y bienestar, y existe una amplia gama de deportes, artes marciales, técnicas orientales, bailes, etc. para elegir.
Como conclusión decir que si nos planteamos muy seriamente realizar dos promesas en este nuevo año, volver a cuidar nuestra alimentación e implantar una actividad física cotidiana son dos apuestas más que interesantes. Encontrarse bien, tendría que ser uno de los objetivos prioritarios en nuestra vida y por ello se necesita de nuestra participación activa.

Art. 164/373 (09-01-2004) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Desde el principio de los tiempos, el ser humano y los animales han tenido una estrecha relación de coexistencia. Los perros, los gatos, los caballos, etc. han formado parte de la vida de muchas personas como “amigos” de compañía. En las últimas décadas, se han realizado numerosas y sorprendentes investigaciones respecto a la utilidad que podrían tener algunos de estos animales en el tratamiento de ciertas enfermedades; ya que la mayoría de personas reaccionan muy positivamente al contacto con animales de compañía.
Existen antecedentes históricos registrados que avalan este hecho. A finales del siglo XVIII, se utilizaban animales de granja para ayudar a ciertos enfermos mentales en el psiquiátrico de York Retreta en Inglaterra. A mediados del siglo XIX, en un centro de Alemania se utilizaban animales para cooperar en el tratamiento de enfermos de epilepsia. En este siglo XX durante la segunda Guerra Mundial, los aviadores estadounidenses lesionados recibían atención con animales por parte de un programa de Cruz Roja. A mediados de este siglo, el prestigioso doctor Samuel B. Ross fundó un centro-granja especializada en el tratamiento de niños y jóvenes. Este centro, situado en las afueras de Nueva York, es el más importante del mundo especializado en este tipo de trabajos. Hoy día, se pueden encontrar muchos centros repartidos por el mundo, incluido en España.
Los programas con animales son especialmente susceptibles en los niños y ancianos obteniendo unos resultados sorprendentes. También se tienen muy buenos resultados en pacientes terminales y personas con ciertos problemas psiquiátricos. En las personas ancianas, por ejemplo, tiene un efecto psicológico muy importante ya que les ofrecen compañía, distracción, mayor sensación de seguridad y autoestima. La responsabilidad de tener que cuidarlos también es importante, así como la necesidad de sacarlos a la calle, al campo o a la playa les obliga a salir de sus casas y realizar paseos activando su sistema cardiovascular. Además, la sensación de amor incondicional que les dan tiene un gran efecto sobre todas las esferas. En los niños, como base, se puede decir que la mayor parte de las características comentadas en los ancianos se les puede aplicar también a ellos. La relación con los animales permite que el niño no tenga su atención centrada en su enfermedad, y le ayuda a pasar los momentos duros de forma que no se sienta solo. Es un punto de apoyo muy importante. En muchas ocasiones, el lazo de complicidad entre el niño y el animal es muy superior a lo que sería con un amigo humano o con los miembros de la familia. Se ha observado que el trabajo con caballos tiene un efecto muy beneficioso en niños con problemas en el habla, y con enfermedades importantes. El trabajo con caballos (equinoterapia) es muy importante en EE.UU. En ese país se trabaja también con enfermos afectados de esclerosis múltiple, parálisis cerebral, A.V.C., autismo y síndrome de Down para ayudar a mejorar el tono muscular y la coordinación, aparte del componente psicoemocional. Otra modalidad muy importante es la delfinoterapia. La terapia de compañía con delfines se inició a finales de los años setenta con excelentes resultados en niños con síndrome de Down, autismo y depresiones severas. En España los pioneros fueron los de la Fundación Delfín Mediterráneo (Cadaqués, Girona) y actualmente han cogido el relevo un equipo de Tenerife. Se ha observado que el trabajo con delfines mejora la sincronicidad entre los dos hemisferios cerebrales y mejora la fisiología de las ondas cerebrales theta y alfa. Se podría seguir con muchos otros ejemplos como el trabajo con perros a enfermos con Alzheimer o para detectar cáncer de vejiga oliendo la orina de la persona…
Muchos animales siempre han sido amigos del ser humano, pero ahora todo va más allá. Se ha abierto una nueva puerta con la zooterapia donde este sistema aún tiene muchas sorpresas que dar y lecciones que enseñarnos.

Art. 165/373 (16-01-2004) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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En los últimos años, un nuevo sistema para el equilibrio y reeducación del cuerpo ha adquirido un gran auge en todo el mundo, es el Método Pilates. Este sistema nació en los años 20 en EE.UU, más concretamente en Nueva York, en manos del alemán Joseph Pilates.
Parece ser que, existieron dos grandes eventos en su vida que marcaron mucho su carácter y su trabajo. En primer lugar, el ser un niño enfermo y débil que tuvo que superarse a si mismo e idear un plan para su autotratamiento, ya que los sistemas de la época no le funcionaban. En segundo lugar, haber sido prisionero de guerra en la Primera Guerra Mundial donde entrenaba y rehabilitaba a sus compañeros de campo, lo que le ofreció una amplia experiencia y material de estudio. Este sistema se basa en un programa muy estudiado de ejercicios (más de 500) que se realizan muy lentamente.
Su práctica debe apoyarse en todo momento de una gran concentración, una correcta visión del esquema corporal de uno, una buena respiración y una relajación mental-corporal unida a una fluidez de movimientos. Suele practicarse bajo la supervisión de un profesional, y se puede realizar sin ayudas extras en el suelo o con el apoyo de ciertos aparatos. Con este método se pretende equilibrar la esfera muscular del cuerpo tonificando los músculos que se encuentran atónicos – débiles y estirando los que se encuentran acortados. Se pretende una corrección postural generalizada basado en un equilibrio músculo-articular. Para ello, hay que contemplar al individuo humano como un todo donde todas sus partes están conectadas e interrelacionadas. Un desequilibrio en un músculo puede provocar otro desequilibrio en otros músculos o estructuras corporales. Con el Método Pilates no se realiza un trabajo muscular aislado sino se contempla todo el sistema como un todo, ya que realmente están conectados por cadenas musculares. En una sesión se suelen trabajar todos los músculos del cuerpo, a través de los encadenamientos de los ejercicios. Generalmente, los movimientos combinan fases de fuerza y de elongación – flexibilidad. Con ello se permite no caer en excesos de sobrecarga o atonía. Cada movimiento que se realiza tiene un número máximo de repeticiones, ya que suponiendo que el ejercicio se realice perfectamente no es necesario sobreestimular los músculos con largas y pesadas ciclos de repeticiones. Se busca la calidad del movimiento frente a la cantidad.
Hay que ser muy consecuente en su enseñanza y práctica ya que un ejercicio mal ejecutado puede ser contraproducente e incluso perjudicial. Este sistema le confiere gran importancia a lo que denominan “la mansión del poder”. Esta zona comprende los músculos superficiales y profundos de la zona abdominal, lumbar y glúteos. El equilibrio de esta zona y activándolos como centro e inicio de cualquier movimiento permite una correcta consecución de los ejercicios. Mantiene cierta analogía con la importancia que se le da en las artes marciales a la zona denominada “hara” o “tan tien” como centro de fuerza, energía respiración y movimientos. Con este sistema se intenta conseguir un mayor control, fuerza y flexibilidad del cuerpo pero sin realizar ningún ejercicio que pueda provocar sobrecarga o lesión en las articulaciones o la espalda. Gracias a ello, también tiene un efecto muy importante como preventivo de lesiones e incluso como sistema colaborador en rehabilitación. Este sistema está indicado para cualquier persona tanto si padece algún tipo de desequilibrio, como si lo que busca es mejorar su esquema corporal y eficacia de movimientos, por ejemplo en deportistas o bailarines. En muchas ocasiones, cuando se practica algún tipo de actividad física suelen desarrollarse mucho unos músculos primarios mientras que otros no. Esta descompensación puede provocar a la larga una lesión o pérdida de efectividad de movimientos. Es por este motivo que atletas de EE.UU. y Gran Bretaña utilizan este sistema de reequilibrio corporal de forma bastante habitual.
Este interesante sistema ofrece muchas posibilidades a todas las personas en general, desde personas con lesiones a deportistas que quieran mejorar a través de una mejora en su funcionalidad músculo-articular. El eslogan que defendía su fundador era “se sentirá mejor en 10 sesiones, se verá mejor en 20 sesiones y tendrá un cuerpo nuevo en 30 sesiones".

Art. 166/373 (23-01-2004) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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La ansiedad y el estrés son dos de los grandes males que afectan a nuestra sociedad desde hace ya décadas. Y parece ser que el pronóstico no es muy favorable, ya que las estadísticas apuntan a que va a ir a más. Para poder hablar más profundamente de este tema contamos con la colaboración de Vicent Ribes Marí, licenciado en psicología y especializado en psicología clínica y de la salud.
Nuestro experto nos comenta que estos dos términos se utilizan actualmente como sinónimos, aunque la palabra ansiedad es más general y estrés más concreto (estrés social, laboral…). Pero ambas denotan una reacción fisiológica-psicológica puntual y adaptativa a las exigencias de nuestro entorno. Es una reacción natural para mantener nuestra supervivencia. Este mismo estado es el que pudieran haber tenido nuestros antepasados prehistóricos cuando tenían que cazar o eran perseguidos por un animal peligroso. En un momento puntual el cuerpo está en estado de ansiedad y estrés y se producen toda una serie de reacciones fisiológicas (aumento de las pulsaciones cardíacas y de la frecuencia respiratoria, libración de hormonas suprarrenales…) que lo preparan física y psicológicamente para luchar o huir. Pero pasado el peligro, todo vuelve a la normalidad. Desde esta perspectiva es cuando se puede decir que estas situaciones son normales (si es puntual, y hay una situación real que provoque este estado). Pero en el momento en que esta situación se vuelve crónica y no podemos controlarla es cuando empieza el problema. Nuestra sociedad actual predispone a que llevemos un estilo de vida que fomenta esta problemática y la cronifica con una gran presión social y modelos de educación muy competitivos y agresivos. Se nos exige mucho, no nos permitimos los fracasos y no se nos ha enseñado a recompensar nuestros éxitos. Antiguamente, estos dos estados estaban más reservados a los adultos con sus cargas laborales, familiares, económicas, etc., pero hoy en día se están empezando a observar muchos casos en personas cada vez más jóvenes, llegando a extremos de observarlo en niños de 8 años; y esto es un gran problema que indica un problema social. Nuestro experto nos aclara que afecta tanto a hombres como a mujeres y que entre el 20 - 30 % de la población lo padece. El sr. Vicent nos explica que la cronificación de estos trastornos no son debido a su inicio o causas sino a las malas formas o estrategias que utilizamos para intentar solucionarlo de una forma repetitiva, y que generalmente son muy erróneas. Esto es lo que constituye la patología y la mantiene.
Los síntomas principales pueden dividirse en tres grupos: psicológicas ( miedo subjetivo, ansiedad anticipatorio, confusión, preocupación anticipada…) , motriz-conductuales (hiperventilación, tensión cuello y cuerpo, torpeza, temblores, voz entrecortada, llantos esporádicos, hablar rápido…), y fisiológicos (palpitaciones, disnea, dolor torácico, temblores, sudoración, aumento de la presión arterial, aumento de la tensión muscular con frecuentes dolores de espalda, trastornos del sueño, nauseas, diarrea …). Una ansiedad cronificada produce un gran desgaste físico y psicológico que puede llegar a evolucionar hasta la aparición de una depresión. Ante estos casos es muy importante pedir ayuda y asesoramiento a un profesional, y más si la persona no ve salida a su situación.
El trabajo a realizar consiste en enseñar y que la persona adquiera una serie de habilidades para poder combatir ese estrés y ansiedad. La solución al problema tiene que ir dirigida a tres ámbitos. El fisiológico, realizando técnicas de relajación (respiración abdominal, tai chi, chi kung, yoga…) y actividades físicas que promuevan un desgaste y una descarga de tensión. El psicológico-cognitivo, enseñando a realizar una correcta interpretación de la situación potenciando la perspectiva racional frente a la emocional. El conductual, que aunque depende mucho de cada caso, iría orientado a tomar conciencia de uno mismo (observarse), aprender técnicas de exposición y toma de decisiones, aumentar la habilidad social, aprender a planificar el tiempo y los objetivos, etc… Con un trabajo conducido se puede obtener muy buenos resultados a situaciones que puedan haber ocasionado años de problemática. Nuestro experto nos comenta que está muy generalizada la utilización de medicamentos farmacológicos para tratar estas situaciones como método único. Pero estos tratamientos químicos son interesantes al principio, cuando existe un cuadro muy agudo de ansiedad y hay que disminuir la sintomatología. Pero sería un error versar todo el peso del tratamiento a la farmacología. Para obtener resultados que se mantengan durante largo tiempo nuestro experto insiste en que hay que enseñar técnicas que ayuden a la persona a combatir y hacer frente el estrés-ansiedad, y adquirir habilidades para ello.
La ansiedad y el estrés son dos de los grandes males de las sociedades más desarrolladas. Tienen graves consecuencias para nuestro mente y nuestro físico y atajar el problema tiene que ser una de las prioridades.

Art. 167/373 (30-01-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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En los últimos años, se ha producido un verdadero “Boom” en lo referente a la utilización de complementos naturales. Cada vez más, las personas tienen más conciencia de que ciertos elementos naturales pueden ayudarnos a mejorar de una forma substancial nuestra salud y calidad de vida. Existe un amplio abanico de vitaminas, minerales, complejos antioxidantes, oligoelementos, plantas… que forman parte del día a día de muchas personas. La salud es el camino que intentan recorrer. Las revistas y libros especializados que antaño hablaban de estos temas han visto como revistas de deportes, moda o incluso “cotilleo” tienen ya sus respectivas secciones con recomendaciones naturales y pequeños monográficos sobre estos nutrientes. Pero hay que ser un poco crítico y no creerse a fe ciega todo lo que uno ve, lee o escucha.
Muchas personas se lanzan sin conocimiento previo alguno, ni asesoramiento profesional, a tomar comprimidos de vitamina E, C… o minerales como el selenio o zinc. Y todo porque ha salido en su revista semanal de la prensa del corazón diciendo que es muy bueno y sano. Uno de los errores más comunes que suelen darse en estos casos es que las personas no saben cómo y cuándo tomarse estos nutrientes. Esto es un mal muy generalizado en todos los países, y a lo que conlleva es a gastar bastante dinero en estos productos sin obtener buenos resultados ya que lo toman mal.
Hace unos años, en el instituto Pauling de EE.UU. se hizo un estudio sobre los niveles de absorción de ciertas vitaminas a partir de su administración y posteriores análisis de sangre. Se observó que las vitaminas tomadas en ayunas se absorbían casi de forma nula y éste es el hecho que quería resaltar esta semana, y que es de gran importancia… ¿cómo debemos tomar los complejos vitamínico – minerales para sacarles el máximo partido?
Es muy habitual, y erróneo, que las personas tomen estos nutrientes por la mañana en ayunas antes del desayuno con un vaso de agua, pensando que con el estómago vacío se absorberá mejor y más deprisa. Pero esto no es así. En el caso de hoy, nos limitaremos a hablar exclusivamente de las vitaminas y minerales ya que otros nutrientes como los aminoácidos, oligoelementos, enzimas, etc. son otro asunto diferente. Generalizando un poco y para no complicar el tema, diremos que las vitaminas y minerales necesitan tener algo en el estómago (estar realizando la digestión) para que se puedan absorber y asimilar correctamente. Dentro de las vitaminas, existen dos fracciones bastante diferenciadas: las vitaminas liposolubles y las hidrosolubles. Las primeras necesitan de la presencia de algún tipo de grasas en los alimentos para poder absorberse, cosa que no ocurre con las segundas. Entre las liposolubles tenemos las vitaminas: K, E, D, A; y entre las hidrosolubles: C, complejo B (B1, B3, B5, etc.). Diremos entonces que todas las vitaminas necesitan tomarse con algún tipo de alimento, y que las liposolubles tienen que contener en esos alimentos algún tipo de grasa – aceite. Una vitamina liposoluble no se absorberá bien en ayunas (estómago vacío) o habiendo comida fruta (naranjas, manzana, melón, etc.). En cambio, si lo hará si hemos comido aguacate, bocadillo con aceite y jamón serrano, tostada con mantequilla, ensalada o verduras con aceite, o pescado azul. En cambio las vitaminas hidrosolubles si que se absorben con comidas más ligeras (macedonia de fruta, zumo de fruta y/o hortalizas), ensaladas, verduras. En el caso de los minerales ocurre lo mismo, necesitan alimentos en el estómago para su correcta asimilación. Esta puntualización que a primera vista pueda parecer una “tontería” tiene más importancia de los que parece ya que más del 60% de las personas que toman complejos vitamínico-minerales lo hacen mal; y si se toman mal se reduce hasta el 90% su capacidad de asimilación y de actuar.
Por ello, hay que tener en cuenta estas recomendaciones para sacar provecho a estos nutrientes, así como conseguir el máximo efecto con menor dosis. De otra forma, estaremos tirando el dinero y recordemos que estos productos naturales no suelen ser baratos.

Art. 168/373 (06-02-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Aunque en alguna ocasión ya se ha tratado el tema de los contaminantes y metales pesados, nunca está de más insistir e informar de sus numerosos peligros que de ellos se derivan. Además, cada día aparece información nueva que hay que revisar. Recientemente, ha salido a la luz pública unas investigaciones que han revelado lo que hace tiempo se viene suponiendo. Nos estamos intoxicando. Pero los resultados han sido más alarmantes de lo esperado, y lo peor de todo es que ocurre sin que la mayoría de personas sean conscientes.
Nos estamos intoxicando con muchos compuestos químicos que están camuflados en incontables productos de uso diario. Unos análisis realizados a un gran número de personas indican que nuestro cuerpo tiende a acumular más de 300 sustancias químicas que a su vez nos contaminan. Acciones tan cotidianas como comer, utilizar agua del grifo, maquillarse, llevar empastes de amalgamas, limpiar la casa con productos específicos, ducharnos, lavarnos los dientes, etc. son factores muy a tener en cuenta y que nadie está protegido a sus efectos. A las cosas cotidianas solemos quitarle importancia y a lo estadísticamente común también. A todo estos hay que sumarlo otros más evidentes y popularmente reconocidos como la contaminación ambiental en las ciudades, la utilización de ciertos pesticidas y plaguicidas, etc. Parece ser que la producción de contaminantes químicos ha crecido de una forma muy alarmante en los últimos 50 años y dado que no existe una legislación adecuada que lo regularice y controle la mejor solución es conocer qué contaminantes son, dónde se encuentran y evitar tener contacto con ellos. El primer lugar donde habría que mirar es en nuestra propia casa. Los disolventes, las pinturas, los barnices, las moquetas, las colonias, los maquillajes, muchos productos de limpieza… poseen en su composición química agentes tóxicos. Si a su vez estos agentes se encuentran juntos e interactúan el peligro es mayor.
Para poner un ejemplo de los muchos que hay, los científicos han demostrado que ciertos dentífricos poseen un antibacteriano denominado triclosán, que dentro de la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EE.UU.) está considerado como un pesticida… no hacen falta más palabras. El plomo es otro agente muy común en nuestras casas. Ingerirlo o inhalarlo crea graves problemas de alteraciones neurológicas y esterilidad. El problema de este metal es que casi no puede eliminarse del organismo por lo que suele irse acumulando a lo largo de los años. Durante décadas, los tubos de escape de los coches han ido expulsando plomo al medio ambiente, que se ha ido acumulando en la tierra, tierra que sirve de sustento para el cultivo de alimentos que consumimos. El plomo también ha estado presente durante mucho tiempo, y aún está en muchos lugares, en las tuberías de agua. Partículas de este plomo y ciertos gases que se desprenden de él son arrastradas por dicha agua, que mucha gente utiliza posteriormente para beber u hacer hervidos, caldos, etc… El aluminio es otro mineral muy tóxico. Se ha observado que las personas que padecen Alzheimer tienen niveles muy elevados de este mineral. Una regla de prevención muy importante es no utilizar nunca utensilios de cocina que lo contengan, pero tampoco hay que abusar del papel de aluminio ni utilizarlo para realizar platos al horno. Pero estos elementos, y muchos otros, también se encuentra muy camuflados en gran número de productos de uso diario como cremas hidratantes, champús, jabones, desodorantes, carmín … Aparte de los mencionados, éstos contienen también en su composición otros elementos secundarios que pueden ser muy perjudiciales para la salud como los parabenos o el zirconio, por mencionar solamente dos ejemplos.
Hemos de recordar que muchos de los productos utilizados en cosmética están fabricados a partir de elementos derivados del petróleo por lo que suelen existir trazas de compuestos presentes en este combustible fósil en los productos de belleza. El problema surge cuando vamos sumando diariamente esta cantidad ingente de sustancias, y recordemos que la piel tiene una gran capacidad de asimilación. Si sumamos el efecto sinérgico que tienen estos compuestos cuando se encuentran juntos, con la capacidad que tienen de acumularse en el organismo, y con la incapacidad que tiene el cuerpo de eliminarlos tenemos un caldo de cultivo óptimo, y con los años, para que sean agente que faciliten la aparición de muchas enfermedades. Pero el tema no acaba aquí…

Art. 169/373 (13-02-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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A la larga lista de agentes contaminantes que están camuflados en muchos elementos de nuestra vida cotidiana tenemos también los BPCs (Bifelinos policlorados). Estos se encuentran principalmente en pinturas, barnices y aislantes térmicos. Producen diversas alteraciones en la salud que van desde desequilibrios neuroendocrinos a infertilidad. También son una de las principales fuentes de los denominados compuestos orgánicos volátiles conjuntamente con los limpiadores, los ambientadores, los disolventes, etc. con efectos alérgenos, irritantes de las vías respiratorias y “agresores” del hígado y de sus funciones. Los ftalatos presentes en algunos plásticos, PVCs, juguetes, cepillos de dientes, perfumes y otros cosméticos tienen un efecto muy perjudicial especialmente sobre la calidad del semen masculino, aunque también afecta a otras funciones corporales. Como se puede observar y deducir, muchos de los compuestos comentados anteriormente –y los que se comentaran con posterioridad- tienen un efecto directo sobre el sistema reproductor masculino y femenino. Muchos de ellos disminuyen la calidad del semen, así como la vida y capacidad de movilidad de los espermatozoides por lo que está muy relacionado con problemas de esterilidad. Curiosamente, en los últimos años se han realizado muchos estudios que confirman que está aumentando alarmantemente los casos de esterilidad masculina (o de poca calidad semen – espermatozoides) en los hombres europeos, canadienses y estadounidenses. El bisfenol que está presente por ejemplo en ciertas botellas de plástico es otro compuesto a resaltar. Como la mayoría de ellos aunque formen parte de una sustancia (ej. pintura o barnices), o de un envase, estos pueden pasar al ambiente a través de la emanación de algún tipo de gases o partículas que quedan suspendidas en el aire, el polvo o en los líquidos o alimentos en que están contenidos. Pero recordemos que existen muchos otros contaminantes que vienen de otras muchas fuentes: los coches, las fábricas, las minas, refinerías de petróleo, reactores de aviones… y los alimentos con sus pesticidas, herbicidas, hormonas, dioxinas y metales pesados (mercurio, plomo, aluminio, cadmio…). Existe una larguísima lista de las denominadas “sustancias preocupantes”, que se puede encontrar en la web de la Agencia para Sustancias Tóxicas y Registro de Enfermedades (http://www.atsdr.cdc.gov/es/toxfaqs/es_toxfaqs_index.html#M), cuya lectura es muy instructiva y a la vez alarmante.
Pero la gran pregunta surge después de todo lo comentado… ¿qué se puede hacer al respecto? Uno de los problemas principales de las sustancias descritas son su efecto acumulativo que tiene sobre el organismo, ya que su eliminación por procesos naturales automáticos no es posible. Esta acumulación puede ser el origen de un gran número de desarreglos o enfermedades, o pueden complicarlo en el caso de que ya existan. Existen varios sistemas para detectar la presencia de estas toxinas en el cuerpo. Muchos expertos recomiendan la biomediciones según el sistema de Voll o Mora, así como el análisis HLBO. Uno de los sistemas más completos es el del análisis del cabello, donde una muestra es enviado a unos laboratorios especializados (Canadá o Bélgica) y realizan un análisis exhaustivo de todas las vitaminas, minerales, oligoelementos, metales pesados, etc. que pueden estar en deficiencia o exceso en el cuerpo, todo corroborado por médicos especializados. A partir de aquí habría que plantear un programa de desintoxicación de choque y posteriormente un mantenimiento. Suelen realizarse depuraciones del hígado y sistema linfático – mesenquimático para limpiar el cuerpo de las toxinas más típicas y reforzar los principales órganos y funciones de eliminación. Posteriormente suelen utilizar otros elementos naturales que con la finalidad de neutralizar y eliminar estas sustancias tóxicas como Piantos, algas (como la clorela o espirula), aminoácidos específicos (L-Cisteina, NAC, L-Glutation), SOD, Germanio-132, Catalasa, Glutation Peroxidasa, etc. dependiendo de los criterios del experto. Un estilo de vida saludable, una correcta alimentación y deporte cotidiano ayudan en gran medida ya que si sumamos a los agentes anteriormente dichos las sustancias tóxicas o cancerígenas del tabaco, la comida basura … tenemos una bomba de relojería que un día va a explotar. Como nadie puede escaparse de este mundo tan artificial podemos controlar ciertos ítems de nuestro entorno: pinturas naturales, casas aireadas, botellas y conservas de cristal, frutas y verduras “payesas”, cosméticos y productos de aseo más naturales, gasolina sin plomo, filtros del coche en buen estado, recorridos cortos a pie o transporte público, etc.
En ocasiones, aunque no se pueda solucionar un problema sí que se pueden tomar ciertas medidas compensatorias mientras que la legislación y los gobiernos se deciden a poner manos a la obra a temas tan serios pero que tan poco les importa como este.

Art. 170/373 (20-02-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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La canela (Cinnamomum zeylanicum) ha sido muy utilizada dentro de la farmacopea y gastronomía desde tiempos antiguos. Existen numerosas alusiones realizadas en las obras de Dioscórides, Avicena y Laguna. Su utilización está expandida a otras y lejanas culturas como la asiática, donde en China se ha utilizado desde hace 4500 años. La canela ha sido una especia muy apreciada y en algunos lugares se la valoraba casi tanto como el oro. Parece ser que uno de los motivos por los que Cristóbal Colon inició su viaje fue para intentar acortar el camino a la India – para buscar la apreciada canela, entre otras cosas – a través del Atlántico.
Esta planta pertenece a la familia de las lauráceas-persoideas-cinnamoneas. Es un árbol pequeño que suele medir entre los 3 y 10 metros de altura. Las ramas de este arbolillo están cubiertas de dos cortezas una de color blanco-amarillento y otra interna más esponjosa y aromática de color pardo. Sus hojas son de un color ver-amarillento, ovaladas – oblongas, brillantes y que suelen medir unos 18 cm. de largo. Tanto la corteza como las hojas son muy aromáticas con el olor típico de la canela, mientras que las flores tienen un olor muy desagradable. Dichas flores son de color blanco o amarillo. El fruto es una pequeña baya de color azulado oscuro o negro. Lo más utilizado de esta planta es la corteza interior de las ramas jóvenes.
Posee interesantes efectos medicinales y es muy apreciada en la gastronomía. En dosis moderadas es un estimulante del sistema digestivo, con efecto aperitivo y disminuye la aparición de gases. Mejora substancialmente las digestiones y aumenta el apetito en casos de inapetencia. Muy utilizada en caso de molestias de estómago, diarrea, flatulencias, pesadez de estómago y náuseas. Hay que añadir que no se recomienda utilizarla en caso de padecer úlcera gastroduodenal. También aumenta el ritmo cardíaco y respiratorio, así como mejora los movimientos peristálticos y eleva un poco la temperatura corporal. Algunos estudios apuntan a que dosis demasiado altas puede provocar somnolencia e incluso afectación de la esfera psicoafectiva dando tristeza o depresión leve. Antiguamente, se utilizaba para facilitar y mejorar las contracciones en el momento del parto ya que tiene un efecto sobre las fibras lisas del útero. Por ello, está contraindicado en caso de mujeres embarazadas. También se ha utilizado ampliamente en caso de alteraciones menstruales como dismenorrea y amenorrea. A nivel externo, se ha utilizado mucho como antiséptico y antimicótico. En algunas personas hipersensibles puede provocar dermatitis de contacto. A la canela también se le han atribuido efectos afrodisíacos, aunque aún no se han confirmado científicamente; pero si es relevante que la utilización para este fin se ha dado en casi todas las culturas antiguas que la conocían.
Según un reciente estudio realizado por investigadores del Departamento de Nutrición Humana del Centro de Investigación en Beltsville (Maryland), la ingesta de canela ayuda a reducir las cifras de azúcar en sangre en las personas diabéticas. Decir que este efecto está en fase de investigación y habría que consultar al médico antes de consumir esta planta en caso de padecer esta enfermedad. Otro estudio reciente confirma también que tiene un interesante efecto reductor de las tasas de colesterol en sangre.
Esta especia puede utilizarse como condimento en los platos de nuestra cocina cotidiana proporcionando un agradable sabor y aroma, a la vez que sacamos provecho de sus positivas propiedades, pero siempre utilizando dosis moderadas.

Art. 171/373 (27-02-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Sudar es una reacción fisiológica natural de nuestro cuerpo a ciertas circunstancias, pero en las últimas décadas se ha instaurado la extraña idea de que está mal visto socialmente. Las personas se preocupan cada vez más por su aspecto físico hasta llegar a extremos tales de considerar el sudor como algo inaceptable. Se intenta luchar contra él, aunque se esté en un lugar abarrotado de gente en el mes de agosto y bailando la última canción “hortera” del verano. ¿Qué dirán mis amigos tan “Chic” si me ven la camiseta húmeda de sudor?, ¡Uff…Dios mío, se me marca el sudor de las axilas! Menudo drama para algunos. Para ello, se han ideado productos antitranspirantes en forma de desodorantes y otros. Hoy en día, es casi imposible encontrar un desodorante que no sea antitranspirante. Lógicamente, la higiene personal es algo que todo el mundo tendría que cuidar. Considerando que compartimos nuestra vida laboral y personal con otras personas, ir aseados y oler bien es una norma de educación loable. Pero eliminar el sudor suele tener una razón estrictamente estético. Pero la gente sabe realmente para que sirve el sudor y los efectos tan perjudiciales que supone suprimirlo.
Tiempo atrás, todo el mundo sabía que la sudoración denotaba purificación y limpieza del cuerpo. Forzar la sudoración era una práctica habitual popular para sanar ciertas enfermedades. También formaba parte de rituales místicos de limpieza mental y espiritual. Hoy día se conoce que este mecanismo fisiológico es de vital importancia para el equilibrio de nuestra salud. Por un lado, es un componente básico del mecanismo de regulación de nuestra temperatura corporal. La eliminación de sudor y su posterior evaporación refrigera nuestro cuerpo cuando está llegando a temperaturas demasiado altas tanto por condiciones externas de temperatura, como por la actividad física. Para que todas las reacciones bioquímicas de nuestro organismo se realicen de una forma correcta, la temperatura de nuestro cuerpo no puede salirse de unos límites; y la sudoración ayuda a ello. Además, según estudios recientes el sudor conlleva una producción de endorfinas. Éstas ayudan en el control del dolor y a tener una mayor sensación de bienestar, tanto físico como psicológico. A todo esto añadir que, es uno de los principales mecanismos relacionados con la eliminación de ciertas sustancias tóxicas del cuerpo. Coopera ayudando a descargar de trabajo al riñón, respecto a la función purificadora. La prueba está que conforme más sudamos menos orinamos y viceversa. Han existido casos de personas que han tenido problemas severos de riñón y que han podido compensar la función desintoxicante de éste –dentro de unos límites- forzando la eliminación de sudor a través de la piel, por ejemplo realizando actividad física. La asociación de aumento de temperatura con la producción y eliminación de sudor está muy relacionada también con la estimulación del sistema inmunitario frente a ciertas infecciones y tumores. En algunos países incluso se recomienda a la población realizar sesiones semanales específicas que fuerzan la sudoración a través de baños hipertérmicos controlados, saunas, etc… como partes integrantes de tratamientos o programas de potencialización de la salud. Incluso informan a las personas que nunca sudan en absoluto –ni con el calor, ni con la actividad física- que eso no es sano. Hace poco tiempo, se produjo un gran enfrentamiento entre ciertos científicos y la industria cosmética ya que los primeros afirmaban que la utilización prolongada de antitranspirantes en la zona axilar podía provocar -con los años- ciertas enfermedades relacionados con el bloqueo y degeneración de los ganglios linfáticos de esa zona. Aún es necesario realizar más estudios al respecto pero es bueno tenerlo en cuenta a priori. Por ello reflexionemos. Una cosa es la salud y otra la “imagen”.
A nadie le gusta asistir a una reunión oficial con traje y al quitarse la americana tener la camisa con ronchas en las axilas, pecho o espalda. Pero existen otras soluciones más sanas como ponerse finas camisetas de media manga debajo, o incluso ponerse camisas completamente blancas o muy oscuras; con los tonos pastel se nota mucho más. Sudar es natural y saludable. Suprimir este mecanismo podría acarrear problemas a la larga… pero claro hay personas que piensan que “antes muerto que…”.

Art. 172/373 (06-03-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Desde muy antiguo, la luna ha formado parte de la vida cotidiana de los seres humanos. Los agricultores siguen sus ciclos para podar, sembrar o recoger las cosechas de hortalizas o frutas. Los pescadores también tienen en cuenta sus ciclos e influye substancialmente a la hora de mejorar sus pescas; parece ser que los mejores días para ciertos tipos de peces son los de luna llena y nueva, así como los 3 días inmediatamente anteriores y posteriores a éstos. También ha formado parte de muchas creencias místicas y cultos religiosos. La luna, la noche… siempre un halo de misterio la ha rodeado.
Quién no sabe que según las fases lunares las mareas cambian substancialmente, que los animales están más agitados en la luna llena, o que también durante esos días aumentan el número de partos en los hospitales o por el contrario de fallecimientos de enfermos. Nuestro satélite ejerce una poderosa influencia gravitacional sobre nuestro planeta, tanto sobre los seres vivos como sobre el clima y fenómenos naturales como los terremotos, maremotos y erupciones volcánicas. Los seres humanos no somos una excepción. Si ejerce tan poderoso efecto sobre las mareas de todo el mundo, que ocurre con los seres humanos que estamos formados por un 70% de agua. Son muchas las creencias y pocos los estudios realizados pero hay ciertos hechos que son poco discutibles ya que la experiencia empírica de los siglos lo avalan. La luna nos influencia sobre la parte física y sobre la psicoemocional. Vamos a exponer toda una serie de ejemplos representativos.
En fase creciente (especialmente alta) hasta la luna llena parece ser que el cuerpo está más activo y tiene mayor capacidad de regeneración. Por ello, es un buen momento para cortarse el cabello si lo que se quiere es que crezca más rápido y vigoroso. En esta fase parece que el cuerpo está más receptivo y tiene mayor capacidad de asimilación de nutrientes, por lo que será un buen momento para realizar programas de fortalecimiento, toma de vitaminas, etc… en el caso de que la persona esté débil o tenga que recuperarse de alguna lesión. A nivel psicoemocional, la luna llena influencia a las personas pueden hacer que se sientan más sensibles, emotivas, ansiosas o incluso excitadas sexualmente hablando. También es un momento donde es más difícil conciliar el sueño, e incluso pueden aumentar las pesadillas o los sueños agitados. Según algunos expertos, la fase creciente hasta su momento álgido de plenitud predispone a realizar actividades más físicas ya que se tiene más energía, las suprarrenales están en pleno rendimiento y es una forma de compensar la hiperexcitación del sistema nervioso. En la fase menguante (especialmente la baja) hasta la luna nueva es un momento en que el cuerpo entra en un estado de mayor reposo. Se activan más las funciones depurativas por lo que es un buen momento para realizar procesos de limpieza y depuración orgánica. Es un buen momento también para realizar ayunos, monodietas o programas destinados a la limpieza y depuración de toxinas acumuladas; especialmente en personas pletóricas. Parece ser que en esta fase el cuerpo tiene mayor resistencia física. Como anécdota comentar que si se corta el cabello en esta fase, éste crece más lentamente. A nivel psicológico, parece ser que en este periodo la mente está más receptiva a la hora de realizar y asimilar cambios; por ejemplo iniciar dietas para perder algo de peso, proyectos, etc. En la fase menguante hasta la luna nueva predispone a la interiorización, la meditación, la reflexión y el estudio.
Existe mucha bibliografía referente a los efectos de la luna sobre los seres vivos, las plantas de jardín y medicinales, la pesca, la agricultura, la salud, etc. que forman un compendio de conocimiento popular muy interesante y que sería una lástima que se perdiera.
Cuando un conocimiento empírico ha traspasado fronteras de tiempo, geografía y culturas… algo tiene que decirnos.

Art. 173/373 (13-03-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Tradicionalmente, España y los demás países latinos de la cuenca mediterránea han tenido al bocadillo como parte imprescindible de los desayunos y meriendas durante muchos años. Una de las ventajas de su éxito es que es muy fácil de preparar y de trasportarse, así como que puede consumirse en cualquier lugar. El bocadillo ofrece casi infinitas posibilidades aunque la mayoría de las personas suelen tener un pensamiento bastante limitado respecto a ello.
El pan es la parte fundamental de un bocadillo. Es un producto típicamente mediterráneo que parece ser que nació en el antiguo Egipto. Posteriormente paso a Grecia y Roma donde se extendió al resto del mundo. Existe una gran multitud de panes donde solo cambiando el tipo de cereal empleado ya cambia la textura, el sabor y el aroma aunque el relleno sea el mismo. Uno de los problemas actuales relacionados es la televisión. Tiene una excesiva influencia sobre las mentes y la capacidad de decisión, y sus campañas publicitarias nos lavan un poco el celebro. Hoy día solamente nos venden el pan de trigo refinado como si fuera lo único que existe, y limitarse a él es una pena. Deliciosos panes de centeno, avena, soja, maíz, cebada, cinco cereales, integrales, con pasas y nueves, piñones y tomillo, etc. constituyen un placer para el paladar. Existe un amplio surtido muy extendido entre la población de Alemania, por ejemplo. El pan proporciona energía, vitaminas, minerales, oligoelementos y fibra (siempre que no sea pan blanco refinado). Además, ofrece una parte de la ración diaria recomendada de cereales-farináceos que son necesarias para nuestro equilibrio alimentario. Al gran abanico de tipos de pan, hay que sumarle la inmensa variedad de “rellenos” que se les puede poner. Con aceite de oliva, tomate, mantequilla, jamón york o serrano (o cualquier otro embutido), atún, patés, quesos, sardinas, lechuga, recula, maíz, brotes de soja, seitan, tofu, zanahoria rallada, pechuga de pollo desmenuzada adobada en leche, salchichas, merluza o lomo rebozado, etc. posibilidades mil. Pero la gente se limita a un tipo de pan y cuatro tipos de rellenos tradicionales: york, serrano, atún y queso. ¡Un poco de imaginación! Pero por desgracia… y en muchas cosas está ocurriendo, nos estamos contagiando negativamente de otras culturas.
Ahora se está poniendo de moda la pastelería y la bollería industrial. La televisión nos “machaca” hasta la saciedad con grandes campañas de marketing los cien mil desayunos y meriendas cargadas de azúcar, colesterol y aditivos. Encima lo venden como si fuera lo más natural y sano del mundo… y por eso (conjuntamente a otros factores) los niños/as son cada vez más obesos y con niveles de colesterol malo disparados en edades tempranas. Y encima la gente se lo cree, han perdido gran parte de su capacidad crítica. Por mucho que las personas piensen que un bocadillo de pan blanco con chorizo es malo por sus grasas, etc., a grosso modo, es mejor que un producto de bollería industrial. Pero hay que tener en cuenta una serie de premisas muy importantes. Primero, es importante que las diferentes variedades del pan sean mayoritariamente integrales. Segundo, es básico variar semanalmente el tipo de pan y no limitarnos a uno como suele ocurrir. Tercero, hay que diversificar con los rellenos también. Habría que ponerle vegetales a los bocadillos como algo normal, ya que solemos limitarlos únicamente a productos derivados cárnicos. El complemento vegetal proporciona muchas ventajas a nivel gastronómico y bioquímico.
Cómo pueden ver, el bocadillo ofrece muchas posibilidades, más de lo que pudieran imaginarse en un principio.
La cultura del “bocata” es muy de nuestras tierras y es algo que hay que rescatar. La contienda “bocadillo vs bollo” tiene que inclinarse hacia la vertiente mediterránea.

Art. 174/373 (20-03-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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La meditación es una de las disciplinas más antiguas, y a su vez afines, a un gran número de culturas a lo largo de la historia. El ser humano siempre ha tenido la inquietud de la espiritualidad, y por ello, una de las vías que ha seguido es el de recogerse en una calma introversión silenciosa para equilibrar su mente y su cuerpo, así como con aquello que le rodea y forma parte.
Existen muchos tipos de meditación tanto en estático como en dinámico. Podemos enumerar el zazen del budismo zen y tibetano como formas estáticas, y el yoga o el tai chi como más dinámicas. Pero generalmente, todos los estilos de meditación tienen los mismos pilares fundamentales: tener absoluta conciencia de la posición que tiene el cuerpo (y buscar la perfección del movimiento si existe dinámica), concentración máxima en la respiración (que suele ser lenta, profunda, abdominal, rítmica y armoniosa), liberación de la mente de cualquier tipo de pensamiento (dejar la mente en vacío, o si aparecen pensamientos no centrarse en ninguno de ellos dejándolos fluir sin prestarles atención), y concentración absoluta en lo que se está realizando en ese momento (ya que ese instante es el más importante de ese momento).
La meditación tiene una amplia tradición de práctica y desarrollo en el mundo asiático, y en esa cultura ha adquirido unos niveles muy elevados de arte. Existen otros tipos de meditación menos conocidos, como el que se realiza mientras se procede a la bella ceremonia de té japonesa, el ikebana (arte floral japonés), el raku o los maravillosos jardines de piedra y arena realizados por los monjes zen. En cambio, hace relativamente poco tiempo que los occidentales han adoptado esta disciplina y sus beneficios. Y para las mentes cartesianas de nuestras latitudes siempre ha despertado mucho curiosidad, y en muchas ocasiones recelo.
En los últimos años, se han realizado interesantes estudios científicos para intentar desvelar los misterios que giran en torno a la meditación y sus efectos sobre el ser humano. La universidad de Wisconsin (EE.UU.) ha sido una de las más pioneras. Desde la década de los 90, varios monjes tibetanos de los más experimentados en el arte de la meditación se han ofrecido voluntarios para dichos estudios. Todo ello con la colaboración y apoyo del Dalai Lama. Las evidencias surgidas como resultado de dichas investigaciones son que la meditación realmente tiene un efecto sobre los seres humanos. Por un lado, tiene un efecto relajante que contribuye a disminuir la tensión arterial, el estrés y la ansiedad. Consecuencia de ello, puede ser un factor preventivo frente a ciertos dolores crónicos y enfermedades coronarias. También se ha observado que favorece la producción endógena de anticuerpos (defensas naturales). Pero lo más relevante ha sido el descubrimiento referido a la gran actividad eléctrica, concretamente el lóbulo prefrontal izquierdo del cerebro, que presentan estos monjes. Éste se encuentra muy poco activo en la mayoría de personas al contrario de la gran actividad que demuestra en los sujetos del estudio. Esta zona está relacionada con las emociones positivas, el autocontrol y el temperamento. Su estimulación y desarrollo predispone a una menor propensión a enfadarse, frustrarse, sorprenderse y sentirse impactados por ciertas circunstancias… en definitiva, tomarse la vida y vivir con más calma, equilibrio y serenidad.
Curiosamente, aunque se ha comentado que las personas que no practican la meditación no suelen tener esta zona muy activada, existen excepciones. Parece ser, que los individuos que manifiestan un carácter marcadamente positivo y que se toman la vida con más tranquilidad suelen tenerlo más desarrollado que la población media.
Otro dato relevante, es el que la meditación promueve la aparición de nuevas conexiones neuronales que no existen en personas que no la realizan. Esto permite alcanzar niveles de conciencia inusualmente observados científicamente hasta la fecha. También mejora de una forma sobredimensionada la amplitud de las ondas gamma muy relacionadas con el aprendizaje y la capacidad de prestar atención. Los científicos confirman que “el cerebro, con un correcto entrenamiento, puede desarrollar funciones y conexiones neuronales nunca imaginadas hasta la fecha”.
Pero para adquirir las ventajas de la meditación no tenemos que transformarnos en monjes, ni pasar largas horas en contemplación. Lógicamente, conforme más tiempo se practique mejores resultados y mayor sensación de calma y bienestar se tendrá en cualquier situación de la vida. Lo importante es la constancia, aunque solamente se haga durante quince minutos al día. Hemos de recordar, que ciertas disciplinas como el yoga, el Tai Chi, o el Chi Kung también forma parte de las denominadas formas de meditación en movimiento. No hay mejor forma de entender que practicando, y cada cual con la vertiente que más se sienta identificado.

Art. 175/373 (27-03-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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El diente de león (Taraxacum officinale – Teraxacum dens-leonis) ha sido una planta muy utilizada dentro de la herbología popular, y conforme han pasado los años, se ha ido demostrando que sus propiedades van más allá de las simples creencias populares.
Pertenece a la familia de las compuestas – asteráceas, y también recibe otros nombres sinónimos como: achicoria amarga, pelosilla, amargón… Parece ser que es originaria de Grecia, pero su fisiología hace que crezca espontáneamente en muchos lugares de Europa, Asia, África y América. Prefiere los suelos húmedos situados entre el nivel del mar y los 1900 metros de altitud. También se cultiva, ya que algunos pueblos utilizan sus hojas basales para la elaboración de ensaladas. Existen numerosas alusiones a sus propiedades en antiguos textos de los maestros Dioscórides, Teophrastus, Plinio y Avicena. Es una planta muy vivaz, anual y perenne, que suele medir entre 10 y 40 cm de alto. Su raíz es oscura y pivotante. Sus hojas basales conforman una disposición en roseta. son además oblongas y de un color verde brillante. Están profundamente divididas en lóbulos triangulares que hacen recordar la forma de los dientes de un león, de ahí su nombre. Su tallo es hueco y lechoso. Sus flores son amarillas, y se sitúan en capítulos solitarios. Se utilizan especialmente sus hojas y raíces.
Sus principios activos principales son: la taraxacina, la taraxacenina, la lactucopricina, el cluitianol, la beta sitosterina, la estigmasterina,, el taraxol, la teta amirina, el taraxerol y el taraxasterol. También posee un alto contenido en glúcidos como la fructosa (máxima concentración en primavera) y la inulina (máxima concentración en otoño, en la raíz); flavonoides (heterósidos del luteolol y del apigenol), carotenoides, y en las hojas un gran número de enzimas, aminoácidos (glutamina y asparagina), así como vitaminas (A, C, D, B2). Esta planta tiene numerosas acciones sobre el organismo humano. Por un lado, estimula la secreción de los órganos digestivos, por ser un tónico amargo, por lo que hace mejorar las digestiones. Tiene una importante acción sobre el hígado y la vesícula biliar, actuando como un potente depurativo de tóxicos hepáticos y circulantes en sangre. Actúa como colerético (aumento la producción de bilis) y colagogo (facilita el vaciamiento de la bilis por parte de la vesícula) por lo que también permite mejorar las digestiones, a la vez que esta capacidad le hace ser un preventivo en la formación de cálculos de vesícula. Su acción diurética ha hecho que sea ampliamente utilizado en caso de cálculos de riñón y “arenilla” a la vez que complementa su efecto depurativo. Parece ser que sus enzimas ayudan a la acción depurativa actuando incluso como antioxidante contra los radicales libres. Actúa también como laxante suave. Tradicionalmente se ha empleado en caso de reumatismos, por una acción indirecta no muy bien conocida aún, y por la acción depurativa. Recordemos que la sobrecarga metabólica de ciertos tóxicos en el cuerpo puede hacer que se produzca o empeore un cuadro de reumatismos provocando dolor e inflamación. En el momento en que destruyen y eliminan esas toxinas y radicales libres se produce una mejoría. Esta planta se emplea tradicionalmente desde tiempos inmemoriales en curas depurativas, principalmente de la planta fresca, y especialmente en el periodo primaveral. Las hojas frescas se vienen utilizando en ensaladas y platos de verduras, y las raíces troceadas y tostadas como sucedáneo del café. Esta es una de las muchas plantas que forman el grupo de hierbas depurativas, conjuntamente con: el cardo mariano, la alcachofera, el desmodium, el rábano negro, etc…
Su efectividad viene avalada por su milenaria utilización popular y por los estudios científicos realizados en las últimas décadas. Su utilización cotidiana ayudaría a que nuestro cuerpo estuviera más libre de toxinas, y por lo tanto más saludable.

Art. 176/373 (03-03-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Desde hace unas décadas, nuestra sociedad está siendo inundada por una idea que está adquiriendo una peligrosa importancia para muchas personas… el culto al cuerpo. Cuidar la imagen se ha transformado en una prioridad tanto para hombres como para mujeres, y ello incluso sería positivo si no se viera enmascarada por engañosas campañas publicitarias y la fomentación excesiva de esta filosofía.
Verse bien, sentirse bien, es muy positivo pero de una forma inteligente. Las personas están siendo muy influenciadas por falsos cánones de belleza promovidos por los anuncios publicitarios, y salirse de ellos puede llegar a acarrear grandes problemas para ellos. Muchos jóvenes, y no tan jóvenes, buscan parecerse a las modelos de pasarela, a los actores de los “vigilantes de la playa”, al modelo que hace el anuncio de los yogures o al futbolista de turno.
Pero no toda la culpa la tiene la publicidad. Las propias personas que buscan conseguir la imagen de ese canon son partícipes del problema. Baja autoestima, excesiva influencia de la opinión de los demás, poco espíritu de sacrificio y la impaciencia por conseguir resultados rápidos hacen que hagan verdaderas “tonterías” para conseguir sus metas. La mayoría odian la actividad física, y no nos engañemos, sin ella no hay milagros. Pero para ello los publicistas nos venden unos fantásticos aparatos de electroestimulación muscular que son una maravilla. Mientras estamos tumbados en el sofá viendo los Simpson, e hinchándonos a bollos, el aparatito hace su trabajo. Nos creemos que el uso exclusivo de ese aparato da la imagen de esos modelos con cuerpos espectacularmente esculpidos. No nos engañemos otra vez. En primer lugar, para que un aparato de electroestimulación muscular sea efectivo tiene que realizarse un deporte de forma habitual y de base. En segundo lugar, para quemar la grasa que tanto nos preocupa, hay que controlar la dieta, tener unos buenos hábitos higiénicos y reiterar en lo de la actividad física cotidiana y aeróbica. En tercer lugar, los “aparatitos” que funcionan superar los 600 Euros. Por otro lado, están otro grupo de personas que si que quieren hacer deporte y se apuntan a un gimnasio para hacer “pesas”. Salvo escasas excepciones, entramos en otra dinámica errónea. Uno se apunta en el gimnasio de turno (muy posible que haga más de 5 años que no practique ninguna actividad) con la idea de “ponerse” como Stallone, Van Damme, la Roca, Vin Diesel o Schwarzenegger en tres meses. La mayoría de monitores se implican en la apuesta, y preparan unas rutinas con ejercicios que te pueden lesionar más fácilmente que si a uno le atropella un coche. Cargas excesivas, mala higiene postural al realizar los ejercicios, máquinas mal graduadas según las características de cada persona, ausencia de calentamiento y estiramientos posteriores a la sesión, etc. es algo habitual. ¡Y como no! los famosos preparados y batidos… La gimnasia se ha transformado en esa antigua herramienta destinada en fortalecer y agilizar el cuerpo (y la mente) como fuente de salud – juventud, en un instrumento para tener un cuerpo “supercachas – fashion” cueste lo que cueste.
Otro tema digno de mencionar es el de la alimentación. La gran mayoría de personas mejorarían enormemente con ciertos cambios alimentarios. Pero su capacidad de sacrificio es cero. La mayoría dicen hacer dieta cuando realmente se la saltan a la torera Una excepción son aquellas personas que tienen un problema metabólico – hormonal, y por lo tanto un problema real para adelgazar realizando una dieta. Pero la mayoría… cómo renunciar a los pastelitos o al chocolate, o a comer como si fueran tres … ¿y los cubatas del fin de semana? Su conclusión es que la dieta está mal hecha… demasiadas verduras, pescado y fruta… ¡Ah! Y de deporte… ni mencionarlo. Pero eso sí, están dispuestos a tomar cualquier pastilla milagrosa que queme grasas, te muscule o fibre para conseguir perder los 10 kilos que sobran antes de llegar al verano o la boda.
El culto al cuerpo se ha convertido en un modismo que ha creado una distorsión tan grande de como ve uno el mundo, que los psicólogos tienen mucho trabajo por hacer. Hay que ser un poco más razonable y ver las cosas como son. Si un jugador de waterpolo, de la NBA, un atleta de salto de vallas o un nadador tienen los cuerpos que tienen es porque entrenan más de ocho horas al día, llevan una dieta específica, e igual si utilizan un electroestimulador y hacen pesas pero como complemento y de una forma inteligente. Tener un cuerpo fuerte y estilizado no tiene que ser una meta sino una consecuencia a un estilo de vida que promueva la salud y el bienestar.

Art. 177/373 (10-03-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Se acerca el buen tiempo, el sol y el calor empiezan a ser más patentes a lo largo del día, y esto hace que las personas sientan la necesidad de disfrutar de ellos. Muchas personas empiezan a realizar incursiones en la playa para relajarse, broncearse, realizar actividades lúdicas al aire libre, e incluso los más valientes darse un chapuzón.
Las Pitiusas son un lugar privilegiado para ello y las personas que en ella viven, o vienen, suelen sentir una especial fascinación por el mar, el sol y la playa. En alguna ocasión ya se habló de las más que relevantes propiedades que tiene el agua del mar. Hoy le toca el turno a la arena de sus playas, que encierran secretos por pocos conocidos.
La arena contiene un gran número de elementos entre los que cabe destacar el sílice, el yodo, el potasio, el magnesio, el fósforo, el azufre, el calcio, fragmentos de placton y algas, sal marina, etc. Su composición explica el porqué de algunas de sus propiedades. A ello hay que sumarle una propiedad más física: tiene la capacidad de mantener durante mucho tiempo el calor producido por el sol. Por ello, ha sido muy utilizado a lo largo de la historia en caso de alteraciones y dolores osteomusculares en las que la aplicación de calor local resultaba beneficiosa. Una técnica muy utilizada ha sido la del baño de arena. Ésta consiste en enterrar la zona dolorida en la arena caliente y seca. Para ello se recomienda mantener la cabeza mojada o húmeda, estar un mínimo de 10 minutos y un máximo de 20 minutos realizando este baño arenoso. Para concluir el protocolo es necesario realizar un baño de mar.
Para las personas que suelen tener un poco más de dificultades en ir a la playa diariamente, se ingenió el denominado saco de arena. Este consiste en fabricar una bolsa pequeña de tela que se llena de arena, previamente limpiada con agua de mar. Se llena la bolsa, pero no al máximo, para que pueda moldearse un poco a la zona donde se va a colocar. Antes de utilizarla se calienta poniéndola en una olla al vapor.
La conjunción formada por los baños de sol, el agua de mar y la arena dan lugar a una de las principales triadas destinadas a fomentar la salud. A grandes rasgos, estimula el metabolismo, equilibra el sistema neuroendocrino e inmunológico, mejora el aspecto psicoemocional, abre las vías respiratorias, actúa como revitalizante, así como mejorar la circulación sanguínea y linfática. Un suave masaje con arena de playa tiene un efecto exfoliante. Externamente, tiene también un efecto tiene efecto antiséptico y antiinflamatorio Los pescadores utilizaban a menudo la arena de playa seca en caso de picaduras de medusas. Andar descalzo por la arena húmeda realiza un estímulo y masaje en la planta de los pies, concretamente en las zonas reflexológicas, por lo que tiene un efecto equilibrador de las funciones metabólicas. Además tiene un efecto muy interesante para relajar los músculos de los pies y las piernas, y mejorar el la circulación sanguínea y linfática de las extremidades inferiores. Recordemos que el agua de mar contiene casi todos los minerales y oligoelementos que necesita nuestro organismo de forma orgánica, biodisponible y de fácil asimilación. Por ello, la arena se beneficia de gran parte de sus propiedades. Además, el agua de mar contiene aproximadamente 35 gramos de cloruro sódico (magnésico, potásico y silícico) frente a los 9 que tiene nuestra sangre. Esta diferencia de concentración hace que por un proceso osmótico nuestro cuerpo pueda absorber las sales minerales del mar con facilidad.
Es muy interesante que aprovechemos los habitantes de estas islas, las ventajas que nos brinda la naturaleza que nos rodea. El sol, la playa y el agua de mar no tendrían que ser elementos exclusivos del verano, sino una fuente de salud que le podemos sacar provecho durante todo el año.

Art. 178/373 (17-04-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Como en alguna ocasión ya se ha comentado, la práctica habitual de algún deporte, gimnasia, arte marcial o baile promueve la regulación, e incluso la potenciación, de muchas funciones fisiológicas. La actividad física está considerada como uno de los pilares básicos para la salud física y psicoemocional. Pero la gran mayoría de deportistas y entrenadores se olvidan, no le dan la suficiente importancia, o realizan incorrectamente los denominados estiramientos musculares o stretching.
Éstos tienen como finalidad básica y fundamental mejorar o mantener la capacidad de elasticidad de los músculos. Se puede decir, que un ser humano cuando nace tiene la máxima capacidad de flexibilidad. Esta capacidad va disminuyendo conforme van pasando los años llegando a la máxima rigidez en la vejez. Si se empezarán a practicar estiramientos – adaptados a la edad – ya desde la primera infancia, y se mantuviera toda la vida, la flexibilidad de nuestro cuerpo podría mantenerse en muy correctas condiciones hasta la tercera edad. Cómo la mayoría de personas no hemos tenido dicha suerte, es muy positivo introducirlo como elemento habitual de nuestra práctica deportiva. Uno puede ser muy rígido en edad adulta pero con la práctica y perseverancia se pueden obtener grandes resultados con el tiempo. Pero para ello, reitero que se necesita constancia y realizar dichos estiramientos de una forma correcta, cosa que no suele ocurrir en el 90% de las ocasiones.
En primer lugar, los estiramientos no tienen que realizarse en frío, sino más bien posterior a un calentamiento previo y/o al final de la sesión de trabajo. Esto es muy importante ya que en caso contrario podemos incluso lesionarnos. En segundo lugar, hay que romper el mito que existe referente a que “estiramientos es igual a sufrimiento – dolor”. Una persona tiene que realizar los ejercicios de estiramiento hasta llegar a un punto de molestia (NO DOLOR). Una vez llegado a ese punto se mantiene la posición. Conforme uno vaya entrenando su flexibilidad, ese punto de molestia llegará cada vez más tarde en comparación al estiramiento del músculo que se esté realizando. En tercer lugar, los estiramientos se realizan, a priori, SIN REBOTES. Para no complicarse y evitar lesiones con sistemas que requieren más conocimientos, es mejor realizar el sistema de estiramientos estáticos. Cuando uno llega al punto de molestia se mantiene esa posición fija. En cuarto lugar, es imprescindible que el movimiento de flexibilidad vaya acompañado de una correcta respiración. Esta será abdominal, lenta y profunda. No hay que aguantar la respiración – apnea - mientras se está en fase de estiramiento ya que este hecho puede ocasionar muchos problemas. Y cuando se inicia el movimiento de estiramiento – que tiene que ser lento – se expulsa lentamente el aire, y se sigue con una pausada respiración abdominal. En quinto lugar, cada estiramiento tiene que durar más de 20 segundos para que sea efectivo. Esto es debido a que cuando se realiza una elongación muscular, se desencadena involuntariamente un reflejo denominado “miotático o de estiramiento”. Este reflejo que tiene nuestro cuerpo sirve para evitar que un músculo que se estire mucho pueda desgarrarse. Por ello, en una primera fase del estiramiento de un músculo se produce dicho reflejo miotático que suele durar entre 15 – 20 segundos. Una vez transcurrido este tiempo el reflejo desaparece – el músculo se relaja – y es cuando empieza la fase de elongación. Por ello, cada estiramiento muscular tendría que ser de al menos 30 segundos en posición mantenida, con la correcta respiración y en el punto de molestia.
A modo de resumen, los ejercicios de stretching y la consecuencia de tener un cuerpo más flexible ofrece las siguientes ventajas: a) una mayor vascularización de los músculos – y con ello, una mayor facilidad de aporte de nutrientes y oxígeno al músculo, así como la eliminación de sustancias residuales metabólicas como el ácido láctico - b) una mayor capacidad de contracción, importante para mejorar la efectividad de ciertos gestos deportivos c) un efecto preventivo frente a ciertas lesiones d) una mayor capacidad y velocidad de recuperación al cansancio físico e incluso de lesiones e) una disminución de la sobrecarga muscular con los consecuentes dolores que pueden originarse. Es triste ver como en los gimnasios, escuelas de artes marciales, campos de fútbol o baloncesto, etc. se invierten grandes proporciones de tiempo y esfuerzo en el rendimiento de la fuerza, velocidad o resistencia pero a la elasticidad se la deja en un segundo o quinto lugar. Tanto niños como adultos sufren los efectos de esta falta de educación física y deportiva con las consecuencias que de ello derivan.

Art. 179/373 (24-04-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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La equinácea, también llamada echinacea, es una de las plantas que más ha cautivado la atención de los científicos en las últimas décadas, y ha sido también una de las plantas más aceptada y utilizada por la población en general. Su historia se remonta a los indios de América del Norte. Se sabe que unas 14 tribus la utilizaban, entre ellas los Sioux y los Comanches, formando parte de su farmacopea tradicional. Los nativos americanos le confirieron varios nombres como “mohka” o “mika-hi”.
Entre ellos, la utilizaban como remedio para un gran número de enfermedades y afecciones con componente infeccioso, principalmente en caso de resfriados, heridas en la boca, ojos irritados con conjuntivitis y ciertas enfermedades venéreas. Tenía un uso importante como estimulante general. Otras aplicaciones muy cotidianas eran para tratar heridas purulentas, la rabia y las picaduras de ciertas serpientes como la de cascabel, así como de insectos venenosos. El nombre europeo deriva del griego “echinos” que significa “erizo” refiriéndose a la forma que tiene su fruto y su disco floral.
Esta planta pertenece a la familia de las Compuestas. Se conocen nueve especies principales de esta planta. Las variedades Echinacea angustifolia y Echinacea purpurea son las que han demostrado tener más poder fitoterápico, y de ellas principalmente la segunda. Suelen medir entre medio metro y un metro de altura. Sus hojas son enteras, de forma estrecha (lineales – lanceoladas) y con tres inervaciones. El disco floral – a veces espinoso - evoluciona en unos primeros estadios de cónico a finalmente ser cóncavo. Los rayos florales son estrechos y de color rosa o púrpura. Su raíz es de color negro y sabor picante. Florece generalmente de junio a agosto. Crece generalmente en praderas y llanuras de EE.UU., pero principalmente en terreno montañoso. Se utilizan principalmente las raíces.
La equinácea posee un gran número de principios activos conocidos, y otros por desvelar. Fitosteroles, ácidos grasos (oleico y linoleico), aceites esenciales (beta-cariofilina, terpenos), glucósidos (echinaceína, echinacósido), resinas, flavonoides, taninos, vitamina C, inulina, y una muy pequeña cantidad de alcaloides. Todo el conjunto le confiere unas muy interesantes propiedades. Cabe destacar la de ser un potente estimulante del sistema inmunitario. Una de sus vías principales es la de estimular los fibroblastos. Asimismo, posee un importante efecto funguicida, bactericida y antivírico; tiene una importante acción contra el Estafilococus aureus, la Escleritzia coli, el pseudomonas aeruginosa y la Cándida Albicans. Muy interesante en caso de faringitis, amigdalitis y gripe. A utilizar en procesos infecciosos de repetición o inmunidad debilitada En caso de flemones, caries, encías inflamadas y abscesos postquirúrgicos es también de gran utilidad. Tiene también un significativo efecto antioxidante frente a los radicales libres. A nivel externo actúa como antiséptica y cicatrizante en caso de heridas, úlceras, llagas, forúnculos. Recordemos que tomada internamente, y aplicando cataplasmas o ungüentos externamente (raíces, hojas y flor), era el remedio casi por excelencia entre los indios norteamericanos en caso de picaduras de serpientes e insectos venenosos. Por ello, puede ser un remedio muy útil en caso de picaduras de abejas o avispas, arañas o incluso de medusas. En el caso de tener el sistema inmunitario debilitado sería una de las plantas principales a utilizar, en especial, preventivamente.
Esta planta tendría que estar presente en nuestro botiquín natural y tenerlo muy en cuenta en nuestros viajes y salidas al campo o a la playa.

Art. 180/373 (01-05-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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Un oligoelemento, explicado de una forma sencilla, viene a significar aquel mineral que el cuerpo tiene y necesita en muy poca cantidad y que tiene una función catalizadora (aumenta la velocidad en que se produce unas determinadas reacciones). Para que un oligoelemento pueda desempeñar su función correctamente tienen que estar presente en el organismo y su actividad no tiene que estar bloqueada. De todos los oligoelementos que nuestro cuerpo tiene y necesita, hoy destacaremos el manganeso.
Éste pertenece al reducido grupo de oligoelementos denominados diatésicos. La palabra diátesis proviene del griego y significa “disposición mórbida”. Explicado de otra forma, la diátesis es la predisposición que cada persona tiene a reaccionar a una alteración, o a adquirir o desarrollar una enfermedad u otra según sea su predisposición genética, y viene influenciada por la forma en que se vive. Una diátesis implica un comportamiento y una capacidad de reacción física y psicoemocional determinada. Relacionándolo todo, el manganeso representa la Diátesis I, es decir, es el oligoelemento de base a un tipo de de diátesis (la primera). La persona que tiene esta diátesis tiene una predisposición genética a desarrollar ciertos tipos de alteraciones, y que generalmente suelen desencadenarse o no dependiendo del estilo de vida que se lleve. Según los expertos, cuando una persona tiene esta predisposición y desarrolla alguna de sus posibles manifestaciones viene implícito un bloqueo, o falta de ese oligoelemento catalizador, en ciertas reacciones bioquímicas que están relacionadas con esas manifestaciones.
Según los estudios realizados en las últimas décadas por Ménétrier, Picard, Deville y otros científicos, la toma de este oligoelemento tendría que ser la base para intentar equilibrar y regular ese organismo y su bioquímica… aparte del tratamiento específico que se realice sobre la alteración o enfermedad, ya que tomar el oligoelemento no interfiere negativamente en ello. Esta misma regla se puede aplicar a cualquiera de los otros elementos diatésicos.
A modo muy resumido, la diátesis I representada por el oligoelemento Manganeso (Mn) se refiera a la predisposición Artrítica – Alérgica o hiperreactiva. Con ello, las personas de este grupo tienen una gran predisposición a desarrollar alergias y/o artritis. Auque estas manifestaciones suelen darse en cualquier edad, suele iniciarse en individuos jóvenes y adolescentes por la que se la considera una Diátesis joven. Estas personas tienen una gran capacidad de respuesta inmunitaria, pero el problema es que lo hacen de una forma descontrolada, excesiva y exacervada. Como se ha comentado, estas personas tienen una predisposición a tener alergias o afecciones agudas de evolución explosiva (muy fuerte) y de corta duración. Otro ejemplo, sería aquellas personas que tienen un episodio de fiebre repentina, que alcanzan temperaturas muy altas, pero que igual al día siguiente o al cabo de dos días están perfectamente como si no hubiera pasado nada. Estas personas suelen desequilibrarse también por una acumulación excesiva de toxinas en su organismo que bloquean muchas reacciones fisiológicas, saturan los órganos depurativos, y suele deberse generalmente a una mala alimentación. Esta diátesis I está relacionada también con otras muchas alteraciones o enfermedades físicas y psicoemocionales, pero que no se comentarán por la gran extensión que ello implicaría (existe una amplia documentación y bibliografía impresa o electrónica, vía Internet). Este oligoelemento y su Diátesis están estrechamente relacionados con el correcto funcionamiento del hígado, por lo que cuidarlo y mejorar su función sería una de las prioridades a tener en cuenta. Además, estas personas empeoran mucho su predisposición con el sedentarismo y se fortalecen mucho con la actividad física. El Manganeso (Mn) además es la base de otras dos diátesis: la II (Manganeso – Cobre) y la III (Manganeso – Cobalto). Como puede observarse, la base de todo es el propio organismo y su capacidad de acción y/o reacción.
Los científicos seguidores del doctor Barnard consideran que el secreto del éxito para reequilibrar alteraciones fisiológicas funcionales, o tratar enfermedades, es trabajando primero sobre la base de lo que denominan nuestro Terreno orgánico. Fortaleciendo y reequilibrando la base, nuestro organismo es capaz de estabilizar muchas funciones fisiológicas. Si es necesario un tratamiento farmacológica para tratar una enfermedad, el cuerpo reaccionará mejor y más rápido. Con ello, el Manganeso como oligoelemento juega un papel crucial en este tipo de terreno diatésico.

Art. 181/373 (08-05-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza), por Josep Colonques Garrido

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La espalda es una parte muy relevante de nuestro cuerpo. El conjunto que forman sus músculos nos proporcionan estructura, sostenimiento, protección y capacidad de movimiento. Es un eje primordial de nuestra anatomía y fisiología, y atenderla tendría que ser una de nuestras prioridades. Pero cuando nos referimos a cuidar nuestra espalda no tenemos que limitarnos exclusivamente a ella. Para ello, tenemos que entender el concepto de “cadena muscular posterior”. Con ella nos referimos a todos los músculos situados en la parte posterior de nuestro cuerpo, es decir, todos los músculos comprendidos desde la planta de los pies a la musculatura cervical, pasando por el tríceps sural - soleo, los isquio-tibiales, los glúteos, el cuadrado lumbar, las dorsales, los romboides, los serrato, los trapecios … solamente por nombrar algunos. Todos ellos conforman la denominada “cadena muscular posterior” que son una serie de músculos encadenados e interconectados que forman – para simplificar la idea – como una fila de fichas de dominó. La estabilidad de uno influencia directamente sobre músculos de la cadena que están a continuación, cercanos o a más distancia. Por ello, para que nuestra espalda esté fuerte, flexible y relajada tenemos que tener también los músculos de los glúteos y piernas fuertes, pero flexibles, y con un equilibrio de tono y funcionalidad entre los integrantes de la cadena.
Uno de los factores más frecuentes de baja laboral son por dolores de espalda (lumbagos, dorsalgias, tortícolis…). Existen diversas causas. Uno de los motivos principales es por mala higiene postural. Formas incorrectas de sentarse, levantar peso o hacer las camas, andar “jorobado” o con la cabeza hacia delante, etc. son ejemplos de ello. Otra causa importante es el de tener problemas en los pies. Tener demasiado puente o pie plano, pisar incorrectamente, llevar un mal calzado, etc. crea desequilibrios en la biomecánica del pie y por efecto de la “cadena muscular posterior” puede crear tensiones en ciertos músculos de las piernas y glúteos desembocando en grandes manifestaciones en la espalda. El sobrepeso, el sedentarismo (ausencia de actividad física) o el exceso de trabajo que implique los músculos de la espalda son otros motivos de gran relevancia. No podemos olvidarnos de los aires acondicionados que con las frías temperaturas a los que se llegan en ciertos despachos son motivo de muchas tortícolis de verano. Después podemos hablar de causas hereditarias y traumáticas. En ocasiones, por nacimiento o fruto de algún accidente pueden aparecer ciertas alteraciones músculo-esqueléticas: tener una pierna un poco más corta que la otra, hernia o profusión discal, pequeñas desviaciones del eje en alguna vértebra, escoliosis, hiperlordosis, cifosis, etc. darán lugar también a manifestaciones en la espalda. Todo ello, origina dos de las principales manifestaciones en esa zona anatómica: contracturas y dolor. Por un lado, el dolor hace que nuestra calidad de vida empeore y nos limita en muchas actividades. Además, para compensar dicho dolor en muchas ocasiones adquirimos ciertas posiciones corporales compensatorias que aún nos perjudicarán más a la larga. Por otro lado, las contracturas - grandes causantes de dolor - pueden provocar bloqueos de diafragma y presión en ciertos nervios raquídeos, así como vasos sanguíneos, ocasionando secundariamente dolores de cabeza, variaciones en la frecuencia y capacidad respiratoria, palpitaciones, ansiedad, astenia, insomnio o sueño poco reparador, etc. En deportistas, estos dolores y contracturas pueden ocasionar una gran disminución de su rendimiento tanto físico como técnico. Por todo ello, cuidar y mantener sana nuestra espalda es de gran importancia.
Para ello, existen profesionales que directamente o indirectamente nos pueden ayudar en gran medida. Dependiendo de la causa y la forma de abordar el problema se puede recurrir a traumatólogos, fisioterapeutas, osteópatas, masajistas deportivos (en el caso de que no exista una lesión o patología de base) y/o podólogos. Un estudio biomecánico y posturológico sería una de las primeras pautas a realizar. En el caso de que sea necesario e indicado un reequilibrio vertebral con suaves manipulaciones osteopáticas son una buena opción, conjuntamente con un tratamiento fisioterápico con electroterapia y masoterapia. ¡ Y cómo no! enfatizar que un buen masaje realizado por un profesional cualificado es una de las mejores formas de relajar las contracturas y secundariamente disminuir el dolor, siempre y cuando no esté contraindicado por algún motivo. La espalda es uno de nuestros ejes y su equilibrio, su salud, debe tenerse muy en cuenta. Recordar que una buena prevención nos puede salvar de futuras lesiones y molestias engorrosas.

Art. 182/373 (15-05-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Según el Diccionario Terminológico de Ciencias Médicas (Masson), el dolor es la “impresión penosa experimentada por un órgano o parte y transmitida al cerebro por los nervios sensitivos”. Es una señal de alarma, un aviso de nuestro organismo que nos indica que algo no funciona bien en él. Muchas enfermedades, alteraciones, traumatismos etc. pueden provocarlo. El dolor nos limita, nos causa malestar, nos impide llevar a cabo nuestra vida de una forma normal y nos deprime. El cuerpo humano posee la denominada sustancia P - mensajero químico - que transmiten los impulsos dolorosos desde los nervios sensitivos al cerebro; y activa los mediadores de la inflamación de ciertos tejidos. A su vez, el cuerpo posee endorfinas, encefalinas y dinorfinas que son uno de los principales grupos opiáceos endógenos, es decir, que el propio cuerpo es capaz de fabricar. Principalmente tienen efecto analgésico.
¿Quién no ha padecido alguna vez de él? … seguro que todo el mundo y más de una vez. Existen dolores leves y otros muy fuertes, incluso insufribles. Según cada individuo, un estímulo doloroso puede sentirlo de una forma más o menos acentuada. Las personas poseen umbrales de resistencia al dolor muy diferentes que pueden variar según las características personales de cada persona o raza. Por ejemplo, los asiáticos poseen un umbral de resistencia mucho mayor, lo resisten mejor y lo notan menos. Personas que practican deportes de contacto como el rugby, el boxeo o las artes marciales acostumbran a su cuerpo a resistirlo más. La sensación de dolor se puede llegar a entrenar y controlar.
A lo largo de la historia, el ser humano ha intentado buscar elementos, o fórmulas, que permitan disminuir o eliminar la sensación dolorosa. Como siempre ha ocurrido, la naturaleza nos ha ofrecido un gran abanico de posibilidades y en ella se han encontrado plantas, minerales, insectos o incluso venenos para tal efecto.
En los tiempos actuales, los científicos continúan buscando principios activos o sistemas más eficaces orientados principalmente a estimular la producción de endorfinas, bloquear la sustancia P (bloquear el dolor), y que a su vez tengan el menor efecto secundario posible. Dentro del mundo de las plantas se han conseguido grandes avances en ellos y los investigadores han conseguido identificar y aislar ciertos componentes que hasta hace poco eran desconocidos. El Eugenol con acción anestésica y que se encuentra en la canela (Cinnamomum zeylnicum), el clavo (Sysygium aromaticum o Eugenia caryophyllata), la Milenrama (Achilea milefolium) y la nuez moscada (Myristica fragans). La Capsaicina (Capsaicinoides) con acción antiálgica y que se encuentra en las guindillas (Capsicum frutescens). Bloquea las neuronas sensoriales primarias que transmiten los impulsos dolorosos. El Camazuleno con acción antiálgica, antiinflamatoria y antirreumática que se encuentra en la manzanilla (Matricaria chamomilla), la milenrama (Achillea millefolium) y la manzanilla ibicenca (Santolina chamaecyparissus spp magonica). El Salicilato de metilo, que es muy parecido al ácido acetil salicílico, con acción antiálgica y antiinflamatoria presente en la ulmaria (Filipendula ulmaria), el sauce blanco (Salix alba) y la esencia de Gaulteria (Gaultheria procumbens). La Curcumina presente en la cúrcuma (Curcuma longa), los Harpagósidos presentes en el Harpagofito (Harpagophytum procumbens) y la Aporfina presente en Sasafrás (Sassafras officinale) poseen esas mismas propiedades. La Xeronina presente en el noni (Morinda citrifolia) posee un efecto analgésico indirecto por su acción sobre la síntesis de endorfinas y de sensibilización de los receptores endorfinas. Estos principios activos, pertenecientes a las plantas anteriormente enumeradas, vienen a coger el relevo a otras muy utilizadas históricamente con un poderoso efecto antiálgico, anestésico y antineurálgico pero que presentan la desventaja de que son muy tóxicas. Su uso se ha relegado a ciertos medicamentos farmacológicos muy específicos y requieren de un gran control por parte del médico. Entre ellos destacar dentro de la familia de las solanáceas el Hyoscianus niger (Beleño negro), Mandragora autumnalis (Mandragora macho), Solanum nigrum (Solano negro), Datura stramonium (Estramonio); y perteneciente a otra familia la papaver somniferum.
La ciencia avanza y las investigaciones nos descubren y muestran misterios que han estado presentes durantes siglos, o milenios, pero sin mucho conocimiento de causa.

Art. 183/373 (22-05-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Estas dos próximas semanas hablaremos de una de las disciplinas orientales más importantes, y que ha tenido un mayor auge en occidente en los últimos 15 años, el Chi Kung. Para ello, contamos con el experto asesoramiento de una persona con más de 20 años de experiencia en estas disciplinas. Se trata del instructor de Tai Chi y Chi Kung, Jesús Bonet. Dentro de su extenso currículum, hay que destacar que fue quien introdujo a nivel federativo el Kung Fu, el Tai Chi y el Chi Kung en las Islas Baleares. Ha colaborado en numerosas publicaciones especializadas y fue asesor en gimnasia china en el programa de televisión “Saber Vivir”. Actualmente, imparte sus clases y enseñanzas en el Budoka (Centros Deportivos). Relatándome sus inicios, es curioso el hecho de que su primer contacto con estas disciplinas chinas fuera en la India. Su formación fue especial ya que sus conocimientos fueron creciendo, evolucionando y madurando gracias a que tuvo la oportunidad de beber de las mejores fuentes. Aprendió el sistema Lohan Chi Kung de la mano del Gran maestro y guardián del sistema, el gran maestro Chen Young Fa, a su vez tataranieto del fundador.
El Chi Kung es una de las cinco especialidades técnicas de la medicina tradicional china. Se la considera una disciplina bioenergética. Trabaja sobre el Qi de la persona favoreciendo su correcto flujo por los meridianos acupunturales y órganos con la finalidad de equilibrar, regular y mejorar la salud del individuo. Recordemos que la Medicina Tradicional China considera que para que los órganos, y otros sistemas orgánicos, desempeñen correctamente su función tienen que tener suficiente Qi y que este circule libremente por ellos y por el resto del cuerpo sin bloqueos. Pero esta disciplina no se limita exclusivamente a este aspecto. El Chi kung posee además de esta parte médica, una más espiritual - desarrollada en los templos budistas como forma de meditación que permite alcanzar estados de conciencia más poderosos -.
Además, posee otra parte más marcial destinada tanto a la defensa personal como a fortalecer el cuerpo y permite disminuir o inhibir la sensación de dolor. Actualmente, se pueden encontrar tendencias puras Budistas o Taoístas, o como mezcla de las dos. Históricamente, esta disciplina fue introducida y desarrollada en un templo Shaolin. Un monje budista llamado boddidharma, que provenía de la India, fue a China como misionero para transmitir el pensamiento budista. En su viaje, se paró en un templo Shaolin donde sus monjes estaban enfermos fruto del duro clima que le hostigaba continuamente. El monje boddidharma les enseñó una serie de ejercicios destinados a fortalecer su cuerpo. De ahí, se desarrollaron las 18 manos del Lohan Chi Kung (Lohan = iluminado o Buda) como parte de un sistema muy completo y extenso. Boddidharma se encontró con la tradición china del Taoísmo, y con el tiempo las dos corrientes filosóficas se fusionaron originando el Chang, o lo que posteriormente se conocería de la mano de la cultura japonesa como Zen. Boddidharma es considerado el primer patriarca del Zen japonés. De todas formas, existen restos escritos sobre las primeras formas del Chi Kung que datan de hace más de 5000 años. Estos escritos se encontraron en unas tablillas de barro encontradas a orillas del río Amarillo. En ellas se explican ciertos ejercicios que imitan a los movimientos de algunos animales, y que tienen la finalidad de promover la salud de quienes lo practican.
El Lohan Chi Kung desarrollado en los templos Shaolin constituye la base de algunos estilos de Kung Fu; podemos encontrar aspectos marciales, terapéuticos y meditativos en este sistema. La primera forma es muy física con movimientos de estiramiento y relajación. Actúa limpiando y desbloqueando los meridianos, fortificando los tendones y con la finalidad última de fortalecer la parte física en general, así como el Chi protector. La segunda forma es más suave, más interna y menos “física”. Está orientada a vitalizar y fortalecer los órganos. La tercera forma representa una vertiente más meditativa y más orientada al plano emocional, psicológico y espiritual. La cuarta forma tiene un aspecto más marcial, muy parecido al Tai Chi; dentro del sistema Choi Lee Fut se la considera la forma más avanzada de Kung Fu….

Art. 184/373 (29-05-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Como explicamos la semana pasada, el Chi Kung es una disciplina china que forma parte de la medicina tradicional china. Su objetivo principal es la de favorecer el correcto flujo de Chi por los meridianos y órganos con la finalidad de equilibrar, regular y mejorar la salud del individuo. También comentábamos que dentro del sistema Lohan Chi Kung existen cuatro niveles distintos con sus correspondientes formas: la primera más estructural (músculo – tendones), la segunda más suave y orientada a nutrir los órganos internos, la tercera enfocada a la meditación, y la cuarta más marcial y muy parecida al Tai Chi.
Nuestro experto concreta que “en Ibiza, después de cerca de 20 años de experiencia trabajando con este sistema, hemos visto que el trabajo más eficaz para nuestra condición occidental se apoya sobre todo en el primer nivel, creando con ello una buena base para poder acceder a los siguientes niveles”. Los pueblos que no son asiáticos suelen tener mucha prisa para conseguir objetivos que exclusivamente pueden alcanzarse como fruto de décadas de gran dedicación, perseverancia, espíritu de superación y sacrificio, autodisciplina, así como deseos de evolucionar y mejorar tanto físicamente como espiritualmente. Antiguamente, en los monasterios donde se desarrollaron esta práctica se realizaba un trabajo muy profundo. La forma básica la trabajaban incesantemente, y solamente después de tener este pilar bien construido y asimilado se iba ascendiendo a los niveles superiores. Cada uno de estos niveles posteriores exigía el mismo trabajo y dedicación; y solamente después de adquirir cierta maestría en una forma se podía avanzar a la siguiente. Los monjes dedicaban la mayor parte de su tiempo y vida a practicarlo y perfeccionarlo.
Con ello, los occidentales no podemos pretender recorrer el camino de una vida dedicada a ello en unos pocos años, y practicando solamente 3 horas a la semana. Pero aunque en nuestras latitudes se enfatice el trabajo de base, los resultados suelen ser sorprendentes. Si lo comparamos con el Tai Chi, el Chi Kung se aprende - y se observan sus efectos - de una forma más rápida. Además por su condición marcial, el Tai Chi no tiene el mismo efecto que el Lohan Chi Kung. Según enfatiza Jesús Bonet, “aunque no se tenga ninguna experiencia previa, las personas entienden mejor y más rápidamente el Chi Kung”. En la actualidad, existen muchos médicos que recomiendan a sus pacientes que empiecen a practicar alguna de estas disciplinas; en especial, en casos de depresión y ansiedad. Pero existen ciertos casos en que es más aconsejado un estilo que otro. Por ello, es necesario pedir asesoramiento al instructor para que valore que disciplina se puede adaptar mejor a las necesidades y particularidades de cada persona.
El Chi Kung es muy interesante ya que estimula tanto el tono muscular como la energía (el Chi). Concretamente los ejercicios que son más Yang son muy aconsejados en personas que sufren abatimiento y/o depresión, ya que suelen tener un estado vital muy bajo. También la práctica habitual de esta disciplina tiene efectos muy positivos sobre ciertos problemas osteomusculares como: artrosis, artritis, reumatismos, rigidez articular, tensiones y dolores musculares, etc.; tanto si se padece alguno de los problemas anteriores como si se quiere realizar un trabajo de prevención. Por ello, es una de las gimnasias que más adeptos ha ganado en los últimos tiempos. Podemos encontrarnos tanto a personas que quieren sentirse mejor, como deportistas que lo practican como complemento, como individuos de la tercera edad. Especialmente, las personas mayores pueden beneficiarse mucho de su práctica, y por ello, ya no es extraño verlos practicar en “dojos”, asociaciones o gimnasios. Pero el Chi Kung está abierto a cualquier edad y condición. También se está transformando en una de las principales ayudas en el caso de la fibromialgia. Incluso las personas que la están sufriendo desde hace tiempo suelen encontrar una gran mejoría al año de practicarlo. Según nuestro experto, el Chi Kung puede ser una excelente herramienta de ayuda a cualquier enfermedad que se padezca, o en su falta como preventivo y forma de mejorar - potenciar nuestra salud.
El Lohan Chi Kung es un sistema muy completo que posee ejercicios para todos los órganos y estados. Con ellos se pueden equilibrar, estimular, relajar, tonificar… funciones, órganos, músculos o tendones, etc. Esta gimnasia china - con sus bellos, elegantes y armoniosos movimientos - pretende aportar sobre todo calidad de vida a las personas que lo practican.

Art. 185/373 (05-06-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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El hipérico (Hypericum perforatum) es conocido en nuestra geografía española con otros nombres como el de pericón, hierba de san Juan, corazoncillo o hierba militar. Desde la antigüedad, ha sido una planta muy respetada y utilizada. Personajes ilustres dentro del mundo de la fitología como Hipócrates, Dioscórides, Paracelso o Sebastian Kneipp recomendaban su uso de forma habitual para desarreglos tales como retención de orina o líquidos, falta de menstruación, quemaduras, contusiones, heridas, dolores artrósicos y reumáticos. No le faltan tampoco leyendas medievales relacionadas como esta planta. Se creía que alejaba a los malos espíritus y que protegía a las personas que lo tomaban de tentaciones del mal. Para que tuviera estas propiedades “mágicas” debía de recogerse en la madrugada del día de San Juan.
El hipérico es una planta perenne, leñosa y que tiene una raíz muy ramificada. Suele medir entre los 20 y 100 cm. de altura. Posee un gran número de hojas que nacen opuestas, tienen forma ovalado –elípticas, enteras y glandulosas. Observadas a contraluz, pueden diferenciarse una serie de pequeñas glándulas en las que se acumula su aceite esencial. También sus flores son muy numerosas. Cada flor posee cinco sépalos de forma ovalado – lanceolado y el mismo número de pétalos que miden el doble que los sépalos. El interior de los pétalos suelen presentar unas manchas de color púrpura o negro. En su centro posee un gran número de estambres, unos 50. Las flores son de un intenso color amarillo – dorado, y al igual que en las hojas, si se observan a contraluz se pueden observar los depósitos donde se acumula su aceite esencial. Al machacar las flores desprende un líquido rojizo, unos de sus aceites esenciales. Generalmente, florecen entre los meses de mayo y agosto; aunque uno de los momentos en que brotan con mayor esplendor en aproximadamente en el día de San Juan, coincidiendo con el solsticio de verano. El fruto de esta planta es una cápsula con tres cámaras en las que en su interior se encuentra unas semillas de color rojizo. Al machacarlas también desprende un aceite de color azul violáceo. De esta planta se utilizan principalmente sus flores.
Su alta concentración de aceites esenciales y sus principios activos específicos son lo que la hacen tan especial. Posee pigmentos como la hipericina y dos precursores que se transforman en ella por la acción de la luz solar (isohipericina y la protohipericina). Además, resaltar la hiperforina que posee un poderoso efecto antimicrobiano frente a estreptococos y estafilococos. Tiene gran riqueza en pigmentos flavonoides, especialmente en las flores. Entre ellos, resaltar el hiperósido que es un derivado de la quercitina. Sus aceites esenciales son famosos y su máxima concentración se encuentra entre mediados y finales de junio. Podemos destacar el mirceno, el cineol y el alfa-pineno. También posee otros componentes como fitosteroles, cumarinas, quercitina, rutina, colina, novoimanina e imanina con actividad antibacteriana. El hipérico tiene numerosas propiedades y aplicaciones. Ya desde la antigüedad ha sido una planta tenida en muy alta estima. Sus aceites esenciales tienen un poderoso efecto cicatrizante y son uno de los remedios naturales más eficientes – y ampliamente utilizado - en caso de quemaduras leves, rozaduras o irritaciones de la piel, así como heridas, aplicándolo externamente; al igual que en casos de contusiones, y distensiones ligamentosas gracias a su acción antiflogística. Internamente, muy utilizado y efectivo en caso de gastritis y úlceras gastroduodenales tomado en ayunas. Volver a remarcar que su acción se debe a su gran efecto cicatrizante y regenerante, así como por su efecto antimicrobiano. A nivel nervioso, esta planta tiene un interesante efecto en el caso de astenia psíquica por exceso de trabajo intelectual. Muy util para estudiantes o personas que tienen una actividad mental intensa. Investigaciones realizadas en las últimas décadas confirman que también posee un efecto importante como antidepresivo y ansiolítico en caso de depresiones leves o moderadas, así como ansiedad, aunque su efecto es algo lento ya que se empiezan a observar sus efectos transcurridos unas 3 semanas. También ha sido muy utilizado en niños en casos de terrores nocturnos. Sorprende también los últimos estudios que le confieren una gran actividad antibacteriana y antiviral.
En las Pitiüsas se encuentra fácilmente, al igual que otra variedad más autóctona el hipericum baleáricum. Con la variedad perforatum se realizaba un remedio casero de uso habitual, el denominado “oli de pericó”. Para su elaboración se dejaba macerar esta planta, hojas y flores, con aceite de oliva “pagès”. El tiempo de maceración podría oscilar entre unos pocos días a seis semanas, y siempre en lugar oscuro y fresco. Para este uso medicinal la recogían en la noche de San Juan y se aplicaba externamente en caso de torceduras, quemaduras o heridas. Como efecto secundario a tener en cuenta, no hay que tomar el sol si se toma esta planta ya que tiene efecto fotosensibilizante y podría provocar eritema.
Aparte de esto, el hipérico es una fantástica planta muy común en nuestras islas y que hay que tenerla muy en cuenta; respetándola a ella y a la naturaleza… claro está!

Art. 186/373 (12-06-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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La medicina tradicional china encierra un inmenso mundo lleno de sabiduría, experiencia y conocimientos. Este arte milenario tiene uno de sus fundamentos en la interrelación del ser humano, su organismo, con la naturaleza y sus ciclos, estaciones, factores climáticos, etc.
A lo largo de miles de años, los sabios chinos han ido creando a partir de la meticulosa observación toda una correlación de elementos aparejados. Han creado una especie de código binario (como el informático) para explicar y comparar todos los elementos y fenómenos de la vida partiendo de la dualidad de Yin – Yang. Todo puede clasificarse como Yin o Yang, pero dependiendo con que se le compare, ya que no hay casi nada absoluto. Así, el día es Yang respecto a la noche que es Yin; pero la noche cerrada (ej. 2 a.m.) es más Yin comparado con la noche que se aproxima al amanecer que es más Yang. La espalda es Yang respecto al pecho, pero las dorsales altas son más Yang que las lumbares que en comparación son más Yin. Es un todo simple y complejo a la vez.
A partir de este pilar se construye todo el corpus de conocimiento de la medicina china, aunque esta peculiar forma de razonar se extiende a cualquier hecho, profesión o circunstancia de la vida. Para un chino, un japonés… no se puede entender la vida si no se comprende las bases del Yin y del Yang, Según su filosofía, las personas tienen una relación de consonancia con los diferentes elementos de la naturaleza. Si uno sigue sus ciclos y vive en armonía y equilibrio con el Yin – Yang, la persona estará sana, fuerte y vivirá muchos años en buen estado físico y mental. En caso contrario, alejarnos de la naturaleza implicará una ruptura y descoordinación de nuestro propio organismo con consecuencias negativas para nuestra salud. Todo está relacionado con todo, un factor influye sobre los otros y viceversa.
Todo este entramado constituye las leyes de los 5 movimientos u elementos. A cada movimiento le corresponde una estación y esta vez hablaremos del verano. Según esta antigua medicina, cada estación provoca unas influencias determinadas sobre nuestro cuerpo y está relacionada con unos órganos determinados, ciertas funciones, unos alimentos y colores, etc. El verano de nuestras latitudes es una estación de naturaleza Yang (calor, luz, muchas horas de sol, sequedad). Su color representativo es el rojo y su imagen el Fuego (Huo). Otras asociaciones con esta estación son: la característica de Crecimiento, el punto cardinal Sur, la fase del día del Mediodía, el sabor Amargo, los órganos – entrañas Corazón e Intestino delgado, la estructura corporal de los Vasos Sanguínesos, la secreción del Sudor, la emoción de la Alegría …
Teniendo en cuenta las características básicas de este movimiento Fuego (Verano) podemos asociarlo a nuestro organismo y tomar una serie de medidas que puede hacer mejorar nuestra salud tanto en esta estación como en las siguientes. En primer lugar, como el verano es una estación calurosa (Yang) para que exista equilibrio tenemos que tomar alimentos preferentemente de naturaleza fría o fresca (Yin) como: verbena, centeno, diente de león, alcachofas, té verde, endivias, lentejas, regaliz, escarola, melocotón, germen de trigo, apio, espárragos, berenjenas, pepino, berros, espinacas, tomates, champiñones, calabacín, soja verde, yogurt ácido, melón, sandía, uva, pera, albaricoque, pulpo – sepia – calamar (con moderación), menta, agua … y en general cualquier alimento o planta que sea amarga; y de color rojo siempre que no se de naturaleza muy caliente: tomate, azukis, col lombarda, pimiento rojo, remolacha, fresa, ciruela, frambuesas … Por el contrario no se aconseja tomar muchos alimentos o plantas de naturaleza caliente o tibio (Yang) como: ajo, hinojo, avena, puerros, cebollas, alcaparras, alcohol, castañas, café, valeriana, tomillo, orégano, romero, jengibre, pimienta, canela, cordero, ginseng rojo, exceso de sal. Además, hay que añadir que en está estación es mejor un sistema de cocción más corto, con menos fuego, menos agua, menor cantidad de sal y menos fuego. Las temperaturas (según lo entendemos los occidentales) mejor que sean frescas, ni muy frías ni muy calientes.
Con referencia a la temperatura, hay que tener en cuenta también otro factor. Nuestro cuerpo está preparado y necesita pasar cierto calor en verano. Si fabricamos microclimas extremos artificiales que no corresponden con la estación - por ejemplo, en oficinas o casas que tienen el aire acondicionado muy fuerte – el cuerpo se desequilibrará, tendrá mayor sensación de calor cuando esté en la calle y no será capaz de hacer frente al frío del invierno cuando llegue esa estación. Se desequilibrará su sistema inmunitario. Otro factor a tener en cuenta es la luz solar (Yang-Verano). Tenemos que aprovechar este máximo número de horas e intensidad solar para cargarnos como si fuéramos baterías. Hay que potenciar la fabricación de serotonina y aprovechar las numerosas propiedades de la luz solar.
Por ello, es aconsejable aprovechar los momentos lúdicos para salir, pasear, ir a la playa… Si no se hace el cuerpo no estará preparado para hacer frente las estaciones en que se den muchas menos horas de sol, manteniendo un equilibrio parecido al que se da ahora. Paralelamente, las personas que aprovechan lo que nos aporta esta estación suelen estar más alegres y tienen una actitud más positiva, optimista y festiva. Para la medicina china es primordial vivir en consonancia con los ciclos estacionales para mantener una buena salud todo el año.
Tener en cuenta unos pocos aspectos relacionados con ello nos puede ayudar mucho a disfrutar de un buen verano, y como no, del resto del años.

Art. 187/373 (19-06-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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La alimentación es un pilar fundamental para nuestra salud, hecho que ya ha sido comentado con frecuencia. Los alimentos que ingerimos diariamente tienen una muy estrecha repercusión sobre nosotros. Por un lado, son los “ladrillos” con los que se forman nuestras células y por otro lado, pueden ser un factor determinante referente a que estemos sanos o enfermos.
Durante los años de la guerra y posguerra, hubo mucha hambre y las personas que vivieron de lleno ese momento quedaron marcadas para siempre. Consecuencia de ello, en las últimas décadas se ha producido un efecto de hiperconsumismo a lo que se refiere a la alimentación. Esas personas no pueden ver una nevera vacía, y no pueden tolerar que sus hijos, nietos… puedan llegar a pasar también hambre. Esto sumado a las fraudulentas campañas publicitarias de la industria alimentaria ha hecho que se relacione la idea de crecimiento, fortaleza, buen alimento con el de “carne roja”. ¿Quién no ha oído la frase de que un plato de ensalada o cereales no alimenta pero un bistec si?.
En torno a la carne roja (ternera, vaca, cordero, buey, etc…) se ha creado toda una serie de variantes procesados que colman las estanterías de los supermercados como carnes en lata, salchichas, patés, etc... Y no nos olvidemos de la charcutería. Pues después de todos estos años, y del culto actual a la carne, se acaba de publicar una investigación muy reveladora que confirma una sospecha que se tenía desde hace tiempo. Diez países europeos (entre ellos España) y casi medio millón de personas han participado en este estudio - financiado por la Agencia Internacional para la Investigación sobre Cáncer (IARC), dependiente de la Organización Mundial de la Salud, y la Comisión Europea - sobre las posibles repercusiones que puede tener sobre la salud la ingesta diaria de más de 160 gramos de carne roja, procesada o charcutería. Los resultados obtenidos confirman que tomar esas cantidades, la mayoría de personas sobrepasan sobradamente esta cantidad diaria, favorece en un 35% la aparición del cáncer de colon. Otros grupos sospechan también que pueda tener una relación directa o indirecta sobre otras alteraciones o enfermedades, pero el estudio se ha enfocado exclusivamente al cáncer de colon. Esta enfermedad está proliferando enormemente en las últimas décadas en los países más industrializados y empieza a ser un problema social, así como sanitario. El estudio resalta a la vez, que si esa frecuencia a la hora de tomar carnes rojas o derivadas fuera con pescado se reduciría en un 31% la posibilidad de padecer este cáncer. Y continúa diciendo que si a la toma de pescado se le sumara la ingesta diaria de frutas y verduras, ejercicio físico cotidiano, y otros hábitos saludables – se presupone que se refieren a dieta equilibrada, no abusar del alcohol… - se reducirían esos valores hasta un 70%.
Los niños y adolescentes actuales viven rodeados de filetes, salchichas, hamburguesas y derivados carnicol industriales. Se creen que la única fuente de proteínas es ésta, que para crecer es vital comer a diario; y nada más lejos de la verdad. Tenemos por ejemplos alimentos como: el pescado (azul y blanco), las carnes blancas (pollo y pavo), las legumbres (especialmente si se toman con un cereal como el arroz integral, el mijo o el centeno), las semillas oleaginosas (almendras, nueces, avellanas, piñones…), las algas (espirulina, clorela, etc.), los quesos curados, el seitan… Todas ellos son fuentes de proteínas y en la variedad encontramos la riqueza. Una persona no puede limitarse a una sola gama de alimentos porque puede sufrir deficiencias nutricionales por un lado, y sobrecargas toxinitas específicas de ese producto por el otro.
La carne roja tendría que limitarse mucho y volver a los patrones alimentarios y conductuales de nuestra cultura, la mediterránea. Recordemos que la dieta mediterránea se la considera la más sana del mundo con sus frutas, verduras, pescado, cereales integrales, legumbres y ¡cómo no! con su buen vino tinto (tomado con moderación). La cultura mediterránea también tiene en su larga tradición de hábitos saludables la práctica de deportes de forma cotidiana, ya desde la época del imperio griego.
Como iniciaba este escrito, “La alimentación es un pilar fundamental para nuestra salud” y un meticuloso trabajo científico de años da otra vez prueba de ello. Hace décadas que estamos dando demasiada importancia a la necesidad de tomar regularmente carne roja. Reconozcamos nuestra equivocación, aprendamos de lo que se nos ha enseñado, y apliquemos en nosotros mismos y en las personas que dependen de nosotros tales conocimientos para cambiar y rectificar. Aprendamos otra vez a comer bien y sano.

Art. 188/373 (26-06-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Muchas personas sienten una cierta repulsión a los insectos, y más en el caso de los denominados “urbanitas”. La mayoría desconocen la gran importancia que tienen para la vida y equilibrio de los distintos ecosistemas del mundo, y según muchos si desaparecieran mejor… Una frase muy común es la de “habría que exterminarlos”. De ello se puede deducir la gran cultura que se tiene sobre la naturaleza y la ecología. Como siempre, el ser humano tiene una visión egoísta y una actitud de soberbia sobre el lugar que ocupa en este planeta, y la forma con que interacciona con el mundo y los seres vivos que le rodean. En el mundo existen millones de especies diferentes de insectos: acuáticos, voladores, terrestres, pequeños, grandes, venenosos… en todos los continentes y en casi todos los climas. Su proporción es exageradamente superior a la de los animales y su presencia en la Tierra también es superior en el tiempo, que se calcula de unos 350 millones de años.
Últimamente, se ha realizado en los países más desarrollados ciertas investigaciones referente a estos “bichitos” desde una perspectiva más que sorprendente para los occidentales. Se ha estudiado su riqueza nutricional atendiendo a: sus miles de variedades, la presencia en número y localizaciones en la Tierra (se encuentran en todos los rincones del mundo), su facilidad y rapidez de reproducción, la composición bioquímica de sus tejidos, lo que puede aportar al ser humano, las repercusiones ambientales a su utilización, el poco espacio que suelen necesitar para vivir y reproducirse, etc.… Este proyecto ha surgido fruto de buscar una alternativa alimentaria en los países del tercer mundo y/o que están en vías de desarrollo de la mano de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación). El informe ha sido más que alentador y recomiendan encarecidamente su consumo por todas las ventajas que de ello se derivan.
Existen más de 1400 especies registradas de insectos que se consideran comestibles. Aunque para algunas personas de nuestras latitudes les pueda parecer espeluznante, no lo es menos para otros pueblos que nosotros consumamos ciertas partes del cerdo (pies, lengua, orejas, morro y tripas), crustáceos (como las gambas o camarones), marisco (ostras, mejillones y almejas), criadillas, sesos, caracoles, etc. que son mas sucios y se alimentan peor que la mayoría de los vegetarianos insectos. Comer insectos no es algo extraño. Se puede constatar que a lo largo de la historia casi todas las civilizaciones del mundo los han consumido existiendo referencias tanto en la Biblia, como en documentos históricos de la antigua cultura egipcia, griega, asiática, etc. Y aunque no nos demos cuenta a priori, nosotros también lo hacemos. Existen insectos muy pequeños y larvas que están presentes en la harina del pan, frutas y verduras, quesos… y nosotros los consumimos sin que tengan efectos negativos. Cierto es que algunos parásitos pueden tener un efecto muy negativo sobre nuestra salud como las tenias, cisticercos, oxiuros y áscaris; pero los insectos catalogados como comestibles no presentan ningún problema para la salud a su consumo, ¡es más! tiene numerosas ventajas.
Análisis realizados por ciertos investigadores revelan que la carne de los insectos está compuesta por los mismos elementos que los animales superiores. El nutriente más destacado por su cantidad y calidad es el de la proteína. La mayoría presenta una concentración que supera al de la carne de ternera o el pescado. Mientras que 100 gramos de carne suele aportar entres el 54 – 57% de proteína, muchos insectos aportan con la misma cantidad entre 64 y 75% de proteínas. Por ejemplo, grillo que tiene más del 60% de proteínas superando el valor nutritivo en la misma proporción que una carne magra. En el mismo grupo se podría incluir la langosta de tierra y el saltamontes. Aparte de su alto contenido proteínico podemos destacar la riqueza que suelen tener en calcio, hierro, zinc, magnesio, vitamina B1 y B2, lisina, ácidos grasos poliinsaturados… De entre ellos podríamos destacar las langostas (de tierra), los huevos de hormiga, las orugas, las cigarras, las crisálidas, los saltamontes, las hormigas, las orugas de mariposa, los alacranes de Japón, las larvas de abeja, las chiches acuáticas… Hay que resaltar además, que como los insectos se alimentan mayoritariamente de vegetales su carne está menos cargada de toxinas y es generalmente más sana en comparación con otros seres de los que solemos alimentarnos como la langosta de mar, la anguila, el mejillón, el emperador o el cerdo; ni que hablar de la comida basura. En el mundo occidental ya existen restaurantes que ofrecen exóticos y deliciosos platos dignos de un gourmet a base de insectos. Incluso en el famoso mercado de la Boquería de Barcelona hay una parada dedicada a su venta.
Como puede observarse su valor nutricional es impresionante y la única barrera que tenemos que derribar es la de nuestra mente y cultura. Se abre una posibilidad para los habitantes de los pueblos menos favorecidos de la Tierra.

Art. 189/373 (03-07-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Estamos en plena época estival y el buen tiempo nos acompaña casi diariamente. Este periodo predispone, y más en unas islas como las nuestras, a ir a la playa y realizar actividades lúdicas donde el mar es el protagonista. Nuestro Mare Nostrum esconde un gran número de elementos que pueden ser muy útiles para el cuidado de nuestra salud.
De todos es sabido, que el agua de mar tiene un gran efecto depurativo y antiséptico, siempre y cuando las aguas sean limpias y no contaminadas. Por ello, realizar baños en sus aguas puede ejercer efectos muy positivos sobre alteraciones de la piel, neuroendocrinas, osteomusculares, inmunitarias, cardiocirculatorias y del sistema linfático. En algunas zonas se hacen depuraciones bebiendo cierta cantidad diaria de agua de mar limpia, que además por su gran contenido en minerales (silicio, yodo, sodio, potasio, calcio, etc.) y oligoelementos actúa como un potente remineralizante. El agua salina ha sido también muy utilizada para realizar irrigaciones nasales. Estas propiedades se ven muy favorecidas por la acción del sol, que tomado con moderación y conciencia es otra fuente inestimable de salud. Sus efectos energizantes son también conocidos a la vez que nos mejora nuestra esfera emocional, ya que tiene una estrecha relación con la serotonina. Todo ello hace que nos sintamos más optimistas, alegres y con más energía. Resaltar que el calor con un porcentaje muy elevado de humedad provoca el efecto contrario: cansancio, apatía y mal estar.
Recordemos también que tomar el sol ayuda a que nuestro organismo sintetice la vitamina D3 que es imprescindible para que el calcio se fije en nuestros huesos. El agua de mar también puede utilizarse para hacerse baños completos en casa. Las posibilidades son muchas como la de hacer una infusión de 4 o 5 litros (caléndula para la piel, pasiflora - melisa y flores de azahar para el sistema nervioso, equinácea para el sistema inmunitario, romero como estimulante…), echarlo a la bañera conjuntamente con agua de mar y el resto con agua dulce. De esta forma se puede sacar provecho a las propiedades de las plantas y del agua marina.
La arena de la playa también ofrece posibilidades. Un suave masaje son ella sobre la piel tienen un poderoso efecto exfoliante de las células muertas a la vez que activa la circulación más superficial. Pero recordemos que no podemos exfoliarnos una vez que se ha empezado a tomar el sol ya que existe el riesgo de que aparezcan manchas en la piel. También se puede utilizar para rellenar unos pequeños sacos de tela, que previamente calentados al vapor, son muy útiles para los problemas artrósicos o reumáticos que mejoran con el calor seco y empeoran con el viento, el frío y/o la humedad. Andar descalzo por la arena mojada de la playa ejerce un efecto masaje sobre las zonas reflexológicas de las plantas de los pies. Con ello, se consigue un reequilibrio de ciertas funciones metabólicas. Los cantos rodados o “códols” que hay en algunas playas de la isla pueden ser muy útiles para realizar suaves masajes para destensar contracturas leves y con gran efecto relajante. Lógicamente, primero hay que utilizar un poco de aceite para que tenga un efecto lubricante y que el contacto de la piedra con la piel no sea erosivo ni abrasivo.
Ciertas algas tienen también un efecto importante sobre la piel, sumado al efecto del agua y del sol. Las pequeñas conchas marinas que nos encontramos pueden ser también útiles para realizar suaves masajes sobre la piel, estimulando el flujo de sangre y linfa. El efecto ondulatorio de las olas del mar, y los “golpecitos” que dan en la zona en que rompen tiene un efecto muy interesante sobre el sistema circulatorio de las piernas. Además, algunos expertos apuntan que tiene cierto efecto anticelulítico, en conjunción con las propiedades oligominerales de la propia agua. Las tierras arcillosas bañadas de agua de mar que hay también en algunas playas tienen excelentes cualidades ante algunos problemas de piel.
Como podemos observar, todo lo enumerado es muy fácil de encontrar, sencillo de utilizar y barato. Si a ello le sumamos los efectos tan beneficiosos que tiene comer ciertas algas y pescados nos damos cuenta que el mar y los elementos que le rodean son una fantástica rebotica. Y todo ello considerando que sus posibilidades son casi ilimitadas considerando que los mares y océanos no están casi explorados y que los científicos apuntan a que esconden verdaderos tesoros para la salud.

Art. 190/373 (10-07-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Aunque en alguna ocasión ya se ha comentado parcialmente el tema de los niños con sobrepeso, lo retomaremos dada la importancia que tiene este tema y al aumento alarmante que se está produciendo en nuestro país.
De todos es sabido, que el sobrepeso implica un gran riesgo para la salud. Predispone a que se desarrollen ciertas enfermedades o alteraciones: cardiovasculares, respiratorias, neuroendocrinas, osteomusculares, etc. aparte del componente psicológico que comporta. Existen personas que tienen cierta predisposición genética a desarrollar sobrepeso u obesidad, pero esta no es la causa principal en la actualidad. Dos componentes marcan el punto de inflexión entre un niño, o adulto, con sobrepeso – atendiendo a sus valores de grasa corporal - y otro que no es: la alimentación y la actividad física.
La niñez es un periodo crucial que marcará muchos aspectos de la vida física y psicológica del futuro individuo adulto. En esta época temprana de la vida es cuando se desarrollan la mayor parte de las estructuras corporales, aunque el desarrollo completo finalice en la adolescencia tardía o al principio del periodo adulto. Cuando se es niño es cuando se forman el total de número de adipositos (células grasas). En función de las que se formen en esta edad tendrá sus consecuencias en los años venideros. Si el niño tiene una alimenta desarreglada se formará un mayor número de adipositos. El número no suele variar a lo largo de la vida pero si que pueden tener mayor tamaño (mayor cantidad de grasa retenida en estas células) o más pequeños (menor cantidad). Como se ha comentado, la forma de alimentarse del niño hasta lo 9 años tiene una importancia primordial e influenciará directamente sobre su constitución, número y tamaño de los adipocitos y predisposición mórbida. Tomar pastelitos, golosinas, refrescos gaseosos azucarados, grasas saturadas, fritos, azucares refinados, etc. hace que aumente la creación del número de estas células grasas. Por el contrario, se ha observado que los niños que basan su alimentación en cereales integrales, fruta y verduras, carne blanca y pescado, con agua y zumos como bebida, y sin abuso de pastelería así como de otras sustancias catalogadas dentro de la categoría de comida basura desarrollan un menor número de células grasas.
Otro factor importante de gran influencia es el de la actividad física. Es crucial que los niños practiquen alguna actividad o deporte desde edades tempranas, y que esta actividad no cese nunca y mantenerla todos los años que sean posibles. Pero los niños cada vez son más sedentarios. Las videoconsolas y la televisión son factores que promueven este sedentarismo. Es muy común que los niños pasen muchas horas al día jugando a los videojuegos y mirando “la caja tonta” desaprovechando un tiempo precioso que podrían invertir realizando actividades físicas lúdicas. Como ya se ha comentado en más de una ocasión, las virtudes de la actividad física en cualquier edad son muchas.
Si sumamos una alimentación equilibrada, limpia y de calidad conjugada con una actividad física cotidiana tenemos unos fuertes pilares que ayudarán a que el niño esté más fuerte y saludable, a la vez que le mantiene en un peso óptimo y le previene de muchas enfermedades.
Curiosamente, un reciente estudio apunta a que los países que han sido la cuna de la dieta mediterránea (España, Italia, Grecia y Malta) están teniendo un gran aumento en el número de niños obesos. Se pierden nuestras identidades culturales y gastronómicas en pos de influencias de otros países. Según los expertos, en las regiones o comunidades donde las personas tienen un bajo nivel económico y/o cultural existe un mayor índice de obesidad. La falta de información, la poca preocupación por la buena alimentación (comer bien no implica gastarse mucho dinero), y los malos hábitos como el sedentarismo son característicos de muchas de las personas que viven en estas zonas.
Según un artículo publicado en www.elmundo.es en la sección elmundosalud: “se barajan entre siete u ocho causas como las responsables de que un niño sea obeso: la falta de ejercicio diario, la carencia de un programa deportivo escolar, la ingesta de refrescos y bollería, ver más de tres horas diarias la televisión, consumir menos de cinco piezas de fruta al día, que uno de los padres sea obeso o que lo sean los dos. Salvo las dos últimas, más ligadas con la herencia genética, las demás son conductas modificables y evitables. Sin embargo, son cada vez más los pequeños que consumen febrilmente productos denominados 'basura'”.
La obesidad infantil es un gran problema real de nuestra sociedad y por ello hay que tomar medidas urgentes, ya que es responsabilidad de todos. Actualmente se está planteando introducir la materia de alimentación en los colegios, cosa que sería muy acertada ya que la educación alimentaria es una asignatura pendiente que tenía que haber sido introducida hace 60 años.

Art. 191/373 (17-07-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Hace relativamente poco tiempo, se ha empezado a comercializar el denominado CLA “Tonalin” (aceite linoleico conjugado). En algunos países como EE.UU. ha tenido una gran aceptación ya que parece ser que tiene unos efectos muy interesantes como reductor del colesterol y como agente adelgazante e incluso algunas empresas lácteas han empezado a complementar sus leches con este componente.
Este CLA es un ácido graso esencial que se encuentra con frecuencia aunque en cantidades muy pequeñas en los aceites de origen vegetal como en los de girasol, maíz, soja, etc. Por el contrario, en las carnes, grasa y lácteos de los animales rumiantes se encuentra en cantidades mucho más elevadas. Dentro de este grupo existen varios tipos de ácidos grasos, aunque parece ser que el más importante es el Ácido Ruménico. El CLA es producido por algunos mamíferos, entre ellos los humanos, en el hígado a partir del ácido linoleico pero en cantidades escasas. En cambio, los rumiantes lo producen en una cantidad mucho más elevada a través de la flora del sistema gastrointestinal. Se calcula que en una dieta equilibrada el consumo diario tendría que ser de unos 1500 mg al día. Pero la realidad es otra, ciertos factores como los hábitos reales alimentarios y de salud, las características constitucionales específicas de la persona, la calidad de los alimentos que se compran y consumen, etc. puede hacer que estos valores mengüen mucho.
Según estudios realizados en los últimos 30 años, el CLA tiene ciertos efectos beneficios sobre la salud. Parece ser que reduce la masa grasa total actuando sobre el peso corporal general, disminuye las tasas de colesterol y los triglicéridos, tiene efectos antioxidantes con gran facilidad para captar los radicales libres, estimula el sistema inmunitario inespecífico y actúa como regulador de ciertas reacciones alérgicas en colaboración con otros principios activos como por ejemplo los omega 3. Los dos últimos efectos se deben a que se produce un aumento de las inmunoglobulinas A, G y M relacionadas con la respuesta inmunitaria a la vez que disminuyen las inmunoglobulinas E que tienen relación con los procesos alérgicos. Pero de todas estas funciones el que mayor interés ha despertado por parte de la población, los medios de comunicación y la industria alimentaria ha sido su efecto sobre el sobrepeso.
Los estudios demuestran que personas que han tomado durante un mínimo de 12 semanas una dosis de 3400 mg al día han reducido los valores de grasa corporal mientras que se han mantenido los de masa magra proteica, es decir, de músculo. Con ello no hay que esperar resultados milagrosos, pero si que de una forma lenta pero constante se va reduciendo la masa grasa. Actualmente, se han publicado más de 1000 estudios científico sobre el CLA donde hay que resaltar: el Estudio de Blankson, Estudio PharmaNutrients, Estudio de Riserus, Estudio de Thom o el Estudio Gaullier JL. Long-term efficacy of TONALIN in obesity. En sus conclusiones confirman que el efecto del CLA va dirigido sobre “la capacidad de reducir el acumulo grasos de las células adiposas y reducir el número de las mismas” (http://www.portalesmedicos.com/noticias/asturiana_fesnad.htm). Como contrapartida, otros estudios defienden resultados diferentes. Parece ser que sí reduce el colesterol pero tanto el malo (LDL) como el bueno (HDL). Otros estudios realizados en Suecia afirman que “personas con sobrepeso han desarrollado un incremento de la resistencia a la insulina, y una reducción de colesterol sérico (HDL)”. En un controvertido informe, la Dra. Stein Medien - médico jefe de la Autoridad Médica Noruega - ha informado sobre casos en que la utilización del CLA implica un riesgo para la salud”. Indica los siguientes casos: “pancreatitis, disfunciones del hígado y esteatosis, hipertensión pulmonar”. Pero hay que recordar que existen más de 1000 estudios internacionales de prestigiosos equipos científicos que avalan la seguridad y los buenos resultados del CLA. Cierto es que no hay que creer en remedios milagrosos y que dentro de la industria alimentaria los intereses económicos juegan un papel muy importante a la hora de balancear un resultado por ciertos grupos de investigación.
Como siempre en estos casos hay opiniones enfrentadas y polémica está servida. ¿Quién tendrá la razón?, el tiempo lo dirá.

Art. 192/373 (24-07-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Existen ciertas actividades cotidianas que son características de ciertas culturas. Entre ellas, hay una que es muy particular de nuestro país y es la tan querida “siesta”, o como denominó el Premio Novel de Literatura Camilo José Cela “el Yoga hispánico”. Siempre se ha debatido si es positiva o negativa su práctica, y una serie de experimentos realizados en las últimas décadas ofrecen una información muy interesante sobre este tema.
Parece ser que la siesta tiene una causa biológica escrita en nuestros genes y que es totalmente normal. Recordemos que muchos animales, tanto salvajes como domésticos, siguen esta costumbre. Un animal que viva en un clima cálido necesitaría un gran gasto de energía para mantener una temperatura estable, que compense la alta temperatura exterior de esas horas, y mantener una actividad normal. La naturaleza siempre busca la economía de energía y la siesta es un mecanismo muy eficiente. Como se ha observado, el clima y la temperatura parecer ser factores determinantes dándose este fenómeno principalmente en zonas cálidas. Se ha observado que animales, o incluso insectos, que realizan “siesta” cuando la temperatura es cálida prescinden de ella cuando hace más frío. Además de este mecanismo natural, existen otras explicaciones que refuerzan la idea de que la costumbre de realizar una “cabezadita” después de comer es positiva.
Según algunos expertos, parece ser que los individuos humanos, tanto los adultos como los niños, sufren una especie de “falta de sueño” crónica. Esta falta de sueño puede ser causa, a corto y largo periodo, de una serie de alteraciones de la salud y enfermedades. También puede ser causa de ciertos peligro como la de tener somnolencia o dormirse cuando se conduce o se desempeña alguna actividad o trabajo que requiere mucha concentración por el peligro que desempeña su práctica. La siesta moderada compensaría con creces esta falta crónica de sueño eliminando las causas de estas tendencias patológicas consecuentes, o los peligros consecuentes de la falta de atención. Se ha observado además, que la siesta mejora el rendimiento laboral de las personas, influye en la mejora de la capacidad de resolver problemas y de concentración, estimula su creatividad, y mejora el estado de ánimo. Pero hay que tener en cuenta un aspecto importante para que la siesta sea productiva, su duración. El tiempo no debe sobrepasar los 30 minutos ya que en caso contrario puede interferir en el descanso y sueño nocturno, así como hacer que la persona esté en un estado de somnolencia y aletargamiento que hará el efecto contrario al deseado: disminuir la capacidad de trabajar y de pensar. La necesidad de siesta está ligada a nuestro reloj biológica, al igual que la necesidad de dormir por la noche.
Como explica el Dr. Scott Campbell, catedrático de Psicología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cornell, en Nueva York (EEUU) “No hay duda de que la siesta tiene una base biológica […] pero, de igual forma que hay personas que necesitan muchas horas de sueño y otras que necesitan pocas, y que hay quien funciona mejor por la mañana y quien es más nocturno, también hay personas a las que les resulta más fácil sestear que a otras […] es muy probable que todos estos tipos estén determinados en gran parte por los genes”.
Las ventajas de la siesta superan con creces sus desventajas. Como desventajas mencionaremos esa sensación de somnolencia y letargo posterior a la siesta y que puede durar incluso más de 1 hora. Esto se debe a que se ha excedido al tiempo aconsejado para realizar este breve descanso postprandial. Si se respeta el tiempo aconsejado (no superior a 30 minutos), la productividad y el rendimiento global aumenta enormemente y no se sufre esa sensación de “atontamiento” al despertarse. Como resumen diremos que la siesta ayuda a que se relajen los músculos y la mente, mejora posteriormente nuestra capacidad física e intelectual, y ayuda a equilibrar nuestras emociones. Durante mucho tiempo, cuando las personas tenían el “bajón” típico después de comer solían –y suelen- recurrir a excitantes como el café.
Los científicos actualmente aseguran que es un grave error y que es preferible descansar aunque sean 15 minutos. La siesta es un “invento español” que durante muchos años ha sido criticado por los otros países alegando además que era reflejo de nuestra sociedad “vaga, con pocas ganas de trabajar y con muchas ganas de fiesta”. Años más tarde, los estudios han revelado lo beneficioso de su práctica y los que antes criticaban nuestra costumbre han tenido que morderse la lengua. Incluso en algunos países están adaptando está costumbre tanto a nivel popular como a nivel de empresa (ya que han observado que los empleados rinden mucho más después). Personajes históricos como Albert Einstein o Thomas Edison eran defensores y practicantes de esta “disciplina” hispánica de “meditación”.

Art. 193/373 (31-07-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Las abejas juegan un papel primordial en los ciclos de la naturaleza donde tienen importantes funciones, por ejemplo, a la hora de polinizar gran número de flores. Estos insectos producen varios tipos de sustancias que el ser humano ha aprendido a valorar y utilizar. Tenemos la miel y la jalea real como poderosos sustancias alimenticias que proporcionan mucha energía y muy ricas en vitaminas, minerales, oligoelementos y enzimas. Otros elementos son la cera que utilizamos para la elaboración de velas naturales para alumbrar, y los propóleos como poderoso estimulante de las defensas, antibiótico y antiséptico. Pero de las abejas hay un componente que en las últimas décadas ha empezado a investigarse aunque dentro de la historia hace muchos siglos que viene utilizándose, su veneno.
Éste ha estado muy mal considerado durante mucho tiempo. Su picadura es objeto de dolor, picor, inflamación en la mayoría de los casos, y en otros de reacciones alérgicas importantes e incluso la muerte por shock. Pero en las últimas décadas se han realizado numerosas investigaciones sobre los efectos que tiene este veneno sobre el metabolismo humano, y sus posibles aplicaciones en el campo de la medicina y la salud. Todo ello deriva de una antigua tradición dada en algunos lugares del mundo donde utilizaban las picaduras directas de las abejas sobre zonas concretas del cuerpo para tratar ciertos malestares o enfermedades.
El veneno de las abejas está formado principalmente por un compuesto denominado apitoxina que tiene diferentes acciones. Por un lado, es capaz de dilatar los vasos sanguíneos capilares, así como acelerar el flujo de sangre por ellos. Por otro lado tiene efecto anticoagulante. También estimula la corteza suprarrenal y la hipófisis activando la producción de corticoesteroides propios. Mejora la funcionalidad del hígado, favorece el metabolismo del sistema nerviosos central y periférico, disminuye de una forma importante la tensión arterial y el ritmo cardíaco, estimula el sistema inmunitario inespecífico, y es un poderososo anestésico local. Según diversos estudios, se ha confirmado que posee un principio activo con gran efecto antiinflamatorio cien veces superior a la hidrocortisona. Otros estudios realizados paralelamente demuestran que tiene una gran capacidad antibiótica – siendo una de las sustancias naturales con mayor efecto de las conocidas hasta la actualidad -, mostrando gran actividad sobre Staphylococcus aureus, Streptococcus pyogenes, Streptococcus faecalis, Diplococcus pneumoniae, Escherichia coli, Salmonella Typha, Proteus vulgaris, Haemophylus infuenzae, Pseudomonas aeruginosa, Klebsiella pneumoniae, Neisseria catarrhalis y la Candida aibicans. Otras acciones son las de estimular la producción de monocitos, macrófagos, linfocitos B y T, inmunoglobulinas y cortisol todo muy relacionado con el sistema defensivo. Además, posee actividad antiarrítmica cardiovascular. Otra acción a añadir es la de mejorar la integridad de las vainas de mielina de los nervios a la vez que mejora los impulsos nerviosos. Favorece también la eliminación por la orina de elementos nitrogenados y de toxinas acumuladas en el cuerpo, aumenta ciertos procesos metabólicos como el óseo (ayudando a la consolidación de fracturas), y acrecienta la oxigenación del los tejidos, etc. Sus acciones son numerosas y sus aplicaciones muy interesantes. Por ello, desde hace siglos se ha utilizado principalmente - empíricamente y dentro de la medicina popular tanto occidental como oriental - para mejorar las defensas, disminuir los edemas, y reducir el dolor en especial en casos de reumatismos; aunque puede observarse que por su largo historial de acciones sus posibilidades son muchas y variadas. Una particularidad a señalar es que el cuerpo humano no tiene capacidad de formar anticuerpos contra el veneno de las abejas después de cierta edad o condiciones por lo que el organismo no puede habituarse a él; aspecto positivo si se plantea como elemento para tratar ciertas enfermedades crónicas.
Pero no todo pueden ser aspectos positivos. La apitoxina tiene efectos muy peligrosos sobre el ser humano en caso de hipersensibilidad a este compuesto (alergia), o en el caso de padecer ciertas enfermedades por lo que en el caso de utilizarlo se tendría que estudiar cada caso particular y consultar al médico de cabecera o especialista.
Existen varias formas de tratar con este veneno de abejas aunque las dos principales son las siguientes. La primera es con picaduras directas de abeja y la segunda son con pequeñas inyecciones de veneno estandarizado realizado por un médico. En los dos casos se aplica sobre la zona afectada. Como siempre, la naturaleza posee secretos que poco a poco vamos descubriendo. Muchos de sus elementos tienen poderosos efectos medicinales y que confirma una de las principales reglas de la farmacopea natural.
Lo que tiene mayor efecto también puede resultar más peligroso. Por ello cautela.

Art. 194/373 (07-08-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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La leche es uno de los alimentos más consumidos en el mundo desde hace siglos. Tanto bebés como niños, e incluso adultos, la consumen de forma habitual. El hecho de que los adultos la tomen es un hecho bastante extraño dentro del reino animal. El ser humano es la única especie que la consume pasado el periodo de lactancia por lo que podríamos considerar que esta conducta es bastante antinatural. Conforme el organismo humano va creciendo y desarrollándose va perdiendo eficacia a la hora de digerir la leche debido a una disminución de ciertas enzimas como la lactasa. Esto puede provocar ciertos problemas de salud. Los individuos adultos pueden tener una intolerancia total a la lactosa, pero ésta también puede ser moderada o leve; siendo los asiáticos la raza que tiene mayores problemas para su digestión y asimilación. Pero estudios recientes revelan que muchas personas manifiestan una intolerancia o alergia camuflada. Un factor importante a tener en cuenta es que además, el ser humano no consume – pasado el periodo de lactancia- la leche más idónea para su organismo. Consume otras de origen animal, generalmente de vaca, que posee moléculas de muy difícil digestión, absorción y metabolización. Si le sumamos el hecho de que la leche de vaca que se vende en la actualidad está excesivamente procesada y manufacturada le estamos sumando puntos al problema. La leche de hoy día no es la de hace 100 años. Y de las hormonas y el pienso del que se alimentan las vacas, así como la forma en que se las explotan en las granjas… mejor ni hablemos. Aunque para algunas personas puede resultar sorprendente, hay que recordar que la leche idónea para nosotros es la de nuestra especia, la humana, y no otra.
Uno de los errores más comunes en la alimentación actual es que las personas suelen limitarse a tomar un tipo de producto y generalmente de una sola fuente. En la diversidad está el equilibrio. Cierto es que la leche de vaca proporciona una fuente importante de calcio, zinc, vitamina A y D, B2 y B12 … pero también otros alimentos pueden aportarlo. Hablar de leche implica hacer referencia a sus derivados como los quesos y yogures. Generalmente estos derivados presentan menos problemas a la hora de asimilarlos. Dentro de las leches animales tenemos otras que son muy interesantes para el consumo humano como las de cabra u oveja. Las moléculas de grasa son mucho más pequeñas que las de la vaca por lo que su digestión y asimilación es mucho más fácil. Además, estos animales suelen estar menos explotados. Pero tenemos el mismo problema relacionado con el colesterol, las grasas saturadas y los productos toxínicos presentes producto de la propia vida del animal y que en parte suele pasar a esta secreción glandular, la leche. Estudios médicos realizados en los últimos años han demostrado que las personas están empeorando su capacidad de digestión de las leches animales, y principalmente la de vaca. Además, se ha observado que su consumo es un factor muy a tener en cuenta en el empeoramiento ciertas alteraciones o enfermedades. Es cada vez más común tener alergia o intolerancia a la leche con manifestaciones directas.
Pero como se ha comentado con anterioridad, un tanto por cierto muy elevado de la población tiene alergia o intolerancia camuflada que se manifiesta de una forma más indirecta. Tener problemas digestivos o intestinales frecuentes (gases, digestiones pesadas, cólicos, diarreas, etc.), alteraciones de la piel, ciertas afecciones respiratorias, hiperproducción de mucosidad en casos de resfriados o gripes, alergias, etc. son ejemplos de ello. Frente a esto, existen alternativas o complementos muy saludables como las leches vegetales. Existe una gran variedad para todos los gustos como las leches de arroz, avena, soja, almendras dulces y chufas. Estas tienen la ventaja de que no provocan apenas alergias o intolerancias (uno de las motivos es que no contiene lactosa), no contienen antibióticos ni hormonas, la grasa es mayoritariamente insaturada (saludable) frente a la grasa saturada de las leches animales y, además no contiene colesterol (e incluso puede ayudar a reducir el que se encuentra en el organismo por sus grasas insaturadas). Por ello, tendríamos que aplicar la regla de “en la variedad está el equilibrio”. Alternar lácteos -entendiéndose como leche, quesos y yogures- provenientes de vaca, cabra, oveja, avena, soja, arroz, almendras dulces y chufas sería la opción más aconsejable. Poco a poco se van introduciendo derivados hasta ahora poco conocidos para la mayoría como el tofu (queso de leche de soja), el kéfir o los yogures de leches vegetales. Tal como expone el Dr. Pamplona Roger en su “Enciclopedia de los alimentos”, 100 gramos de almendras o 100 gramos de fríjoles o 500 g de brócoli proporcionan la misma cantidad de calcio que 200 ml de leche. Por ello, la idea de que uno de los motivos imprescindibles para consumir leche era el aporte de calcio se ve desmentido ya que existen otras fuentes muy buenas. Otro ejemplo es el del alga hiziki donde 100 gramos aportan 1400 mg de calcio.
Es muy común que las campañas de publicidad desorienten o mal informen realmente a la población sobre temas de alimentación en pos de ganar ventas. Por ello, el sentido común y la información son dos aliados que nos pueden ayudar a mantenernos sanos y saludables.

Art. 195/373 (14-08-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Estamos en el año 2005, y vivimos en una sociedad moderna, incluso muy futurista comparándola con la sociedad de la década de los años cincuenta del siglo XX. El mundo ha evolucionado mucho en un siglo y la electricidad ha sido uno de los mayores inventos y logros del ser humano. Actualmente, no podemos entender una vida sin ella y sin el sinfín de instrumentos electrónicos que usamos cotidianamente. Televisores, teléfonos móviles, ordenadores conectados mediante redes WiFi, conexiones inalámbricas por ondas de radio o bluetooth – incluso por satélite como los GPS -, neveras, lavadoras, home cinema, aires acondicionados, DVD´s,… la lista es interminable y todo alimentada con nuestra querida electricidad.
Cada casa y cada oficina de cada ciudad moderna del mundo dispone de un gran surtido de gadgets a los que utilizamos casi diariamente, y esto tiene consecuencias sobre nuestro cuerpo. Un aparato eléctrico, sea inalámbrico o no, irradia un campo electromagnético, es decir, eléctrico y magnético. Dependiendo de su intensidad distancia y tiempo de exposición puede alterar el funcionamiento de nuestras células. En el mundo, existen campos eléctricos y/o magnéticos naturales como el que se produce en las tormentas, en las tormentas solares, el que producen los polos terrestres o incluso los yacimientos de minerales ferromagnéticos. En el otro extremo tenemos los artificiales producidos por generadores o centrales eléctricas que a su vez alimentan a aparatos y electrodomésticos que irradian a su vez más pequeños campos electromagnéticos. Éstos pueden ser de alta frecuencia o baja frecuencia, pero incluso en el caso de los de baja frecuencia artificial sobrepasa enormemente la intensidad de los campos naturales. En las últimas décadas han incrementado enormemente, en una progresión que continúa aumentando, el volumen y la potencia de estos campos, en especial en las zonas urbanas. Cada día estamos expuestos a ellos más tiempo y en mayor cantidad.
Según estudios realizados en las últimas décadas, esto puede provocar cambios en el funcionamiento biológico de nuestro metabolismo, alterando reacciones atómicas y moleculares. Tal como enumera el Geobiólogo Mariano Bueno en su ya famoso libro “El Gran Libro de la Casa Sana”, los efectos a una exposición prolongada puede dar lugar a: “cambios en la temperatura de la piel o el cuerpo, alteración en los electrólitos de la sangre, dolor muscular en las articulaciones, alteraciones en la visión de los colores rojo-verde, fatiga, cambios en los potenciales evocados, falta de apetito, influencia en el sistema nervioso central, estrés, disminución en el número de plaquetas en sangre”. Parece ser que incluso los campos electromagnéticos débiles pueden ser peligrosos alterando la composición de la sangre, aumentado la producción de cortisona, subiendo la tensión arterial y predisponiendo a desestabilizar principalmente las funciones cardiovasculares, neuroendocrinas y gastrointestinales. Su exposición produce un gran debilitamiento del sistema inmunitario a la vez que sobreesfuerza las glándulas suprarrenales, produciéndose un efecto al que han denominado electroestrés. Ciertos estudios, que han provocado mucha controversia, afirman que hay una incidencia directa entre ciertos tipos de leucemia y la exposición de las personas enfermas a enormes campos electromagnéticos ocasionados por vivir demasiado cerca de ciertas instalaciones eléctricas. Otros estudios demuestras que mujeres expuestas a largas horas de trabajo en ordenador o que utilizan asiduamente mantas eléctricas suelen desarrollar una mayor predisposición a tener abortos. Parece ser que las altas y bajas frecuencias artificiales favorecen el desarrollo de células tumorales. Pero claro, hay que tener en cuenta también otros factores como la predisposición genética, el estilo de vida (sedentario, fumador…), el tipo de alimentación, etc. Actualmente, uno de los mayores problemas es la que ocasiona el vivir cerca de líneas de alta tensión.
Efectos más típicos son: cambios de humor, migrañas, estrés, depresiones sin causa aparente, insomnio, falta de concentración, nerviosismo, cansancio o incluso agotamiento (sin motivo aparente), hipercolesterolemia, dolores musculares o articulares, acúfenos, etc. A nivel práctico, hay una serie de consejos que puede ayudar a solventar muchos de los problemas que los campos electromagnéticos artificiales nos pueden ocasionar. En primer lugar, es una muy mala idea comprar o alquilar una casa que esté cerca de una central eléctrica, torres de alta tensión o tendidos eléctricos de ferrocarriles. Los lugares de reposo como los dormitorios tendrían que estar exentos de ordenadores, televisores, altavoces, etc… y vigilar que en la parte externa de la vivienda no exista un transformador cerca del dormitorio. Evitar enchufes, radiorrelojes y móviles en las mesillas de la alcoba o en la cabecera de la cama. Vigilar que la instalación eléctrica de la vivienda u oficina esté en perfecto estado, sin cables pelados y con conexión a tierra. Los aparatos que no utilicemos tenerlos desenchufados y evitar en lo posible los electrodomésticos que generan campos electromagnéticos por motor eléctrico giratorio como los secadores de pelo y las batidoras.
La tecnología y la electricidad nos ha dado mayor bienestar en nuestras vidas, pero henos de ser conscientes de sus efectos negativos y tomar precauciones para ello.

Art. 196/373 (21-08-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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La música es una forma de comunicación, un arte, una forma de transmitir armonía y vibraciones que ha acompañado a lo largo de los siglos al ser humano. Desde los primeros tiempos, los hombre y mujeres han tenido la necesidad de crear sonidos, formar ritmos que han evolucionado desde la percusión a los instrumentos de cuerda, viento o electrónicos. La música comprende muchos estilos y la reacción que tiene sobre nosotros es muy subjetiva. Una canción, un fragmento de música clásica u ópera nos puede emocionar, incomodar, teletransportar mentalmente a un lugar o un tiempo. La verdad es que a la mayoría nos moviliza los sentimientos, aunque sea de forma muy diferente. En muchas leyendas e historias míticas antiguas se le atribuyen poderes a ciertos sonidos, palabras… “el poder del verbo”, “la fuerza de la voz”. Los primeros ejemplos dentro de la historia de la humanidad tiene un componente más místico y esotérico. Ejemplos de ello son los rituales de los brujos y chamanes. Parece ser que sacerdotes del antiguo Egipto, de Grecia o de los Mayas utilizaban el don de las palabras y el cántico. Los mantras de los monjes budistas y los sonidos de los cuencos tibetanos son otros de los muchos ejemplos que podemos encontrar. Como puede observarse la utilización del sonido va más allá del tiempo y del lugar geográfico.
A finales del siglo XX se produjo un gran impulso por parte de ciertos expertos de estudiar los efectos y propiedades que podían tener los sonidos o la música sobre los seres vivos. Experimentos sobre animales y plantas dieron a conocer que existe un efecto que pasa por encima del raciocinio o del “placebo” sobre ciertos estados anímicos o fases de evolución y crecimiento. Posteriormente, se profundizó su estudio sobre los individuos humanos con resultados sorprendentes. De todo ello nació la denominada Musicoterapia.
Esta disciplina trata sobre la capacidad que tienen los sonidos y la música sobre la mente, las emociones y el cuerpo físico. La musicoterapia se engloba dentro de las denominadas medicinas vibracionales que utilizan las características de los sonidos (frecuencias, tonos, escalas, estructuras rítmicas…) para actuar principalmente sobre la actividad eléctrica del cerebro. Recordemos que el cerebro controla todas las funciones y estructuras de nuestro cuerpo y actuando sobre él se puede ejercer influencias indirectas sobre otros sistemas de nuestro organismo, tanto físico como psicológico y emocional. Para ser más concreto y profundizar en su conocimiento, su definición según la Federación mundial de Musicoterapia: "la musicoterapia es la utilización de la música y/o de sus elementos (sonido, ritmo, melodía y armonía) por un Musicoterapeuta calificado, con un paciente o grupo, en un proceso destinado a facilitar y promover comunicación, aprendizaje, movilización, expresión, organización u otros objetivos terapéuticos relevantes, a fin de asistir a las necesidades físicas, psíquicas, sociales y cognitivas." Dentro de la musicoterapia se han desarrollado diferentes vertientes. Unas están más encaminadas a estudiar y formar música y sonidos ambientales que promuevan la relajación y el bienestar, ya sea en una casa, oficina, hospital, etc… Otras están más enfocadas a la neuropsicología, donde tenemos un ejemplo muy representativo en el caso del hospital de veteranos de Boston, donde ayudan a personas que han perdido el habla por diversas causas utilizando la música y los sonidos como sistema de estimulación psicomotriz. Existe otra forma mucho más sutil que utiliza sonidos puros y ciertas frecuencias para trabajar e influenciar sobre ciertas zonas del cuerpo o sistemas, aspectos mentales o sistemas energéticos del metabolismo. Aunque a priori, pueda parecer ciencia ficción es real y existen estudios que lo demuestran. Parecer ser que en la época de la guerra fría tanto americanos como científicos rusos hicieron muchos estudios y pruebas al respecto. En la actualidad, uno de los campos de acción más definidos y utilizados es sobre nuestro sistema emocional. Ciertos tipos de música ejercen efectos poderosos frente ciertos estados anímicos como la depresión, tristeza, rabia, estrés, etc… y sus consecuencias como el insomnio, nerviosismo, aumento de la tensión arterial, migrañas, etc. También su aplicación sobre la coordinación psicomotriz, la memorización y la concentración es ampliamente conocida. Otro campo de actuación es en el caso de personas con problemas de alcoholismo y drogodependencia. Como la musicoterapia actúa a nivel cerebral y de ahí al sistema nervioso central y periférico todo lo que esté relacionado con ello puede ser objeto de trabajo como sobre la tensión arterial, el ritmo y profundidad respiratoria, la temperatura corporal, la coordinación muscular, la liberación de endorfinas, el sistema inmunológico, etc…
Esta ciencia en fase de desarrollo presenta muchas ventajas y sin efectos adversos, a priori. Pero recordemos que el sonido, la música y sus características, pueden ser también utilizados para hacer daño como en experimentos realizados en el campo militar. Esperemos que su evolución vaya más destinada a ayudar a las personas que a hacerles daño.

Art. 197/373 (28-08-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Existe en la actualidad un gran impulso por parte de la población, instituciones y diferentes colectivos a promocionar la salud. Como dice el refrán “más vale prevenir que curar” y realmente la efectividad de esta filosofía es más que destacable. Parece ser que las personas se están dando cuenta de la importancia que tiene mantenerse sano, comer bien – saludablemente, hacer deporte, etc. para poder sobrellevar una vida de mejor calidad y evitar en lo posible la precipitación de ciertas enfermedades que aparecen cuando los hábitos de vida no son los correctos. Parece ser que también están entendiendo que “el cuerpo pasa factura”… y que si uno se cuida de joven, la vejez puede ser substancialmente mejor.
El mensaje está llegando y se observa un cierto cambio entre ciertos sectores de la sociedad. Se está intentando promocionar el deporte y la actividad física ya desde edades tempranas, y la tercera edad ya no queda excluida con actividades tan interesantes como el baile, el yoga, el tai chi o el chi kung. En las escuelas están controlando más la alimentación y están intentando concienciar a los niños y sus padres de la importancia de desayunar frutas, yogures y bocadillos frente a la monodieta de “chuches” y bollería industrial que se había instaurado en la última década. Se vuelve a impulsar la dieta mediterránea y sus componentes frente a la avalancha de productos de comida rápida y prefabricada que estaba inundando nuestros supermercados y casas. Parece ser que se está respirando un cambio, un renacimiento de una concienciación hacia nuestra propia salud y el respeto al medioambiente. A ello, la comunicación y la información ha desempeñado, y continua jugando un papel muy importante.
Cada día más investigadores están estudiando los factores que hacen mejorar o empeorar la salud. Las revistas donde se publican estos estudios están más al alcance de la gente, en parte gracias a Internet que ha permitido romper barreras temporales, geográficas, culturales y lingüísticas. La información está cada vez más al alcance de casi cualquier persona aunque hay que saber buscarla y tener espíritu crítico respecto a la información que se encuentra. La prensa también se ha subido este carro y cada vez más se publican revistas divulgativas, artículos, monográficos, y suplementos destinados a informar a la población sobre el mundo que gira alrededor de la salud y el medioambiente.
Pero no todo es bucólico, y existen detrás otras verdades e intereses que menguan y ensombrecen este momento de concienciación cultural. Por un lado, tenemos el problema de la propia información, que en muchas ocasiones desde sus propios orígenes está manipulada a favor de determinados intereses por parte de ciertos individuos, sociedades o corporaciones. Por otro lado, tenemos que dos de las industrias más poderosas – la alimentaria y la farmacéutica – juegan y se enriquecen con miles de millones de dólares y euros con dos de las necesidades más básicas del ser humano … la comida y la salud. ¡Y con ello juegan!.
Escándalos como la del vioxx son la punta del iceberg de algo que viene desarrollándose desde hace décadas. Lo importante es el dinero y el poder y no la salud de las personas. Muchas de estas industrias, por suerte no todas, utilizan la salud y las enfermedades como vehículo o medio de enriquecerse sin mostrar el menor intereses moral y ético por el bienestar de las personas. Nos encontramos que muchas de estas empresas o corporaciones no tienen ningún tipo de respeto por la naturaleza contaminándola sin pudor, utilizan mano de obra barata en países subdesarrollados y desembolsando millones de dólares en multas por su tendencia monopolista (aunque les compensa). Hoy día, lo importante no es que un científico haya realizado un descubrimiento - fruto de años de trabajo, dedicación y sacrificio – de un nuevo medicamento que puede salvar miles de vidas, sino la patente que pueden conseguir ciertas industrias y el dinero que sacarán con su explotación y venta. Hay ejemplos de médicos y científicos que no han podido ver la luz de sus resultados con los medicamentos que han ideado porque iban en contra de los intereses de algunas corporaciones - y que consisten en comprar la patente para hacer un gran negocio -; en contra de la idea del médico, bioquímico, biólogo o sea cual fuere la especialidad del investigador de regalar la fórmula a los países pobres y necesitados de ella.
Por otra parte, la industria alimentaria juega y se aprovecha del filón que supone esta nueva tendencia que tiene la gente de cuidarse un poco más. Están vendiendo una imagen, están creando un modismo fruto de un impresionante marketing publicitario dando a entender que lo más fashion hoy día es comer yogurt de soja, beber leche con jalea real y comer cereales integrales para regular el tracto intestinal. Pero bajo esa imagen de publicidad sana no indican si la soja es o no transgénica, si los cereales integrales están cargados de pesticidas y herbicidas, o si la leche está hormonada. La imagen y las ventas es lo que prevalece y esto en contra del consumidor y de su salud. Anuncios de ricos postres rosados que alimentan como un buey - pero sin decir que el colorante rosado puede desencadenar episodios asmáticos alérgicos en niños débiles predispuestos -, enlatados con ricos y saludables aceites vegetales – sin decir que esos aceites vegetales son de coco o palma y que son más saturados que la propia grasa animal, con las consecuencias que de ello derivan -, “supermargarina rica en aceites…” - sin decir que lo que le añaden a un aceite vegetal para que sea sólido a temperatura ambiente es peor que la grasa saturada de una mantequilla natural - , “cueces o …” – a saber de que restos estarán hechos -, etc. la lista es exasperadamente interminable.
Y ni que hablemos de ciertas campañas de concienciación en salud: “fumar mata”, “fumar es el responsable del …% cáncer de pulmón”, “prohibido fumar en los lugares públicos” …, pero se permite vender tabaco y que ciertas industrias tabacaleras “enriquezcan” los propios cigarrillos con sustancias que hacen aumentar la adicción.
Por un lado, debemos estar contentos con este cierto cambio de concienciación hacia el medioambiente y la salud, pero a la vez tenemos que ser críticos con la hipocresía que algunos estamentos y corporaciones tienen dando una imagen de “¡contribuimos con la mejora del medioambiente!”, “¡nos importa tu salud!” en pos de una única y real finalidad económica.

Art. 198/373 (04-09-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Cuando en la prensa u otros medios de comunicación aparece el nombre de una planta a la que se le atribuyen efectos importantes, casi automáticamente lo relacionamos con hierbas de zonas lejanas e inexploradas del mundo como la selva del Amazonas o regiones inhóspitas de Asia o África. Pero no todas las plantas interesantes están fuera de nuestro continente o incluso de nuestras propias fronteras. Una de ellas es bien conocida pero poco valorada, el romero. Esta planta tiene como nombre científico Rosmarinus officinalis y se la está empezando a denominar como ginseng mediterráneo. Este sobrenombre es muy acertado debido a sus efectos y se la considera una de las joyas herbológicas del Mediterráneo. Existen numerosas alusiones a él por parte de ilustres personajes históricos como Dióscorides, Laguna, Paracelso, Carlomagno, Arnau de Vilanova, Ramón Llull. Recordemos que Arnau de Vilanova y Ramón Llull han pasado a la historia por sus textos literarios, pero parece ser que tenían otra faceta desconocida para la mayoría y era la de alquimistas expertos en las propiedades y usos de hierbas. Parece ser que el nombre de esta planta viene a significar rosa del mar o rocío del mar.
El romero es un arbusto perenne que pertenece a la familia de las labiadas. Puede llegar a medir 2 metros de altura. Sus hojas son de un color verde oscuro y nacen de forma opuesta. Son estrechas y alargadas con los bordes torcidos hacia abajo. Sus flores son muy pequeñas y forman grupos de 5-10 inflorescencias de color violeta azulado que en ocasiones puede llegar a ser casi blanco. Su cáliz es acampanado y bilabiado. Su corola también bilabiada de color azul pálido. Está planta es muy aromática, crece con mucha facilidad y es muy resistente. Generalmente, sus flores están presentes durante casi todo el año.
Esta planta tiene un gran número de propiedades atribuidas ya desde los textos clásicos de la botánica europea. Muchas de ellas han sido corroboradas por estudios científicos y otras aún están por demostrar. Uno de sus efectos más importantes y relevantes es la de ser un potente estimulante del organismo. Quien la ha tomado nota como que se vigoriza, adquiere más energía y fuerza para realizar las cosas por lo que es muy útil en épocas de cansancio, astenia, debilidad, sobrecarga profesional física y/o intelectual, en deportistas, etc… Pero además, es un estimulante inmunológico, a la vez que refuerza el sistema nervioso. Todo ello hace que sea muy a tener en cuenta en los cambios estacionales y en situaciones de estrés o sobreesfuerzos. Otra de sus interesantes propiedades está relacionada con su acción protectora sobre el hígado y su efecto regulador – estimulante de las funciones digestivas. Otros principios activos hacen que actúe como estimulante de la circulación sanguínea fortaleciendo la pared de sus vasos. Abre el apetito en personas desganadas, y ha sido ampliamente utilizada en casos de amenorrea u oligomenorrea. En muchos textos mencionan su gran capacidad para mejorar la memoria, incluso es famosa la tradición que tienen los alumnos de la universidad de la Sorbona que suelen tomarla en épocas cercanas a los exámenes. Para este fin sería una buena combinación emplearla conjuntamente con el Ginkgo Biloba. Externamente es muy conocido su uso como antirreumàtico, antiinflamatorio, cicatrizante y analgésico. La utilización del romero en forma de decocciones, tinturas y maceraciones en aceite son las más usuales. Pero un tipo de decocción o maceración se ha perdido a lo largo de la historia aunque se ha mantenido en las islas Pitiusas. Es la que utiliza vino tinto como disolvente en vez de agua.
En nuestras islas tenemos el tan conocido vi de romaní. En ella se macera romero en vino pagès durante mínimo 10 días. Posteriormente se cuela y se guarda en botellas bien tapadas. Se bebe un vasito antes de las comidas en personas debilitadas o que necesitaban reponer sus fuerzas y sus defensas. También se hacían decocciones con vino tinto pero con fuego muy lento. Otro uso muy habitual y que se ha conservado hasta hoy en día en nuestras islas es la del espirit de romaní. En ella se llena una botella de cristal con romero, se tapa bien y se deja al sol. Esto solamente puede realizarse durante los tres meses de verano en que el sol tiene la fuerza suficiente para realizar la extracción. Con el tiempo va destilándose un aceite que posteriormente se guardará en botellas opacas, y guardadas en lugar oscuro y bien tapadas. Cada cierto tiempo hay que ir vaciando el aceite destilado de la planta para que no se sobreoxide por la acción del astro y su calor, a la vez que hay que ir cambiando y reponiendo ramas nuevas de romero. Este aceite se aplica en friegas sobre músculos y articulaciones doloridas.
En la mitología ha sido una planta muy utilizada en rituales religiosos y funerarios. También se la relaciona con el amor, la felicidad, la sinceridad y el matrimonio. En el mediterráneo existía la tradición de quemar una brizna de romero en cada habitación de una nueva vivienda o negocio en el día que se inauguraba. Incluso existe una leyenda atribuida a la reina Isabel de Hungría sobre una pócima de salud, belleza y juventud.
El romero es una planta que ha acompañado a nuestra cultura Mediterránea desde tiempo antiguo. Ha sido, es y seguirá siendo una de nuestros mayores tesoros botánicos.

Art. 199/373 (11-09-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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¿Quien de nosotros no ha tenido la sensación de que con los años cada vez nos volvemos más rígidos? Esta rigidez y falta de movilidad que va adquiriendo nuestro cuerpo se traduce también a una mayor predisposición e incidencia a tener ciertos problemas, lesiones o incluso enfermedades. Muchas veces ocurre que durante la niñez y la adolescencia somos practicantes habituales de algún deporte. Pero cuando llega la edad adulta con sus responsabilidades, trabajo, pareja, familia, hijos, etc. las personas olvidan el ejercicio y se sumergen en una dinámica de sedentarismo sumado al sinfín de preocupaciones que acompaña a la responsabilidades. Al pasar un par de años como mucho, estos antiguos deportistas empiezan a notar que sus articulaciones están más rígidas, se sienten más pesados, empiezan a notar dolores de espalda o incluso a padecer lumbagos cuando nunca habían tenido antes, etc. Si esto perdura muchos años, la vejez puede ser conflictiva con grandes problemas osteoarticulares y musculares, para no hablar de las otras consecuencias a las que conlleva el sedentarismo.
La rigidez es fruto de las consecuencias del paso del tiempo, básicamente del sedentarismo conjuntado con una mala higiene de vida y alimentación. Al nacer los bebés son pura flexibilidad (flexibilidad 100), sus músculos y tendones tienen una gran capacidad de elongación y las articulaciones están bien hidratadas. Con los años, nuestro cuerpo va perdiendo esta capacidad de flexibilizarse. Los músculos van creciendo y desarrollándose, conjuntamente con sus tendones, pero si no se realizan estiramientos y de una forma correcta el equilibrio entre la capacidad de contraerse y alongarse se rompe.
Las toxinas que solemos introducir en nuestro cuerpo fruto de ciertos aditivos como los conservantes y los colorantes, el tabaco, el alcohol, residuos de ciertos alimentos industrializados, los alimentos de harina refinada, los refresco azucarados, etc. – o los propios que producimos nosotros como los radicales libres que generan nuestro propio estrés, los gases tóxicos que genera nuestro cuerpo y en especial las personas que sufren de estreñimiento, etc. – se van depositando a lo largo de las décadas en muchas partes de nuestro cuerpo, entre ellos en los músculos y las articulaciones. Esta acumulación es fruto de que saturamos tanto a nuestro organismo de toxinas que no es capaz, por sus propios medios, de eliminarlos a la misma velocidad que los introducimos o formamos. Una de las consecuencias de esta acumulación es que la zona que rodea a los tóxicos se vuelve más ácida - y esto favorece a la formación de radicales libres, bloqueos en las reacciones químico-físicas, oxidación, envejecimiento precoz … - o sea a que degenere (caso de las articulaciones) o que pierda su capacidad funcional (músculos y tendones) aumentando la tendencia a contraerse y dificultando la capacidad de relajarse, incluso que nos duela a al ejercer una mínima presión sobre la musculatura. Consecuencia de ello, parece que nuestro cuerpo sea como las visagras de una puerta vieja que ha perdido lubricante, le cuesta abrirse y cerrarse y además chirría.
Para ello, hay medidas que se pueden tomar para hacer frente a esta tendencia natural. Conforme empecemos a tomar medidas a edades más tempranas mejor, aunque incluso en la vejez se puede rectificar con buenos resultados. En primer lugar, hay que volver a movilizar a nuestro cuerpo para que esta disminución de la capacidad de movimiento vuelva a aumentar. Para ello hay que trabajar nuestra musculatura con una actividad adaptada a nuestra edad y condición física como puede ser el tai chi, chi kung, yoga, baile, natación, artes marciales, jogging, bicicleta, gimnasia, etc. Es importante tener en cuenta que si hace tiempo que no realizamos actividad no queramos recuperar el tiempo perdido en dos días. Hay que empezar paulatinamente con poco tiempo y poca intensidad e ir aumentando conforme pasan las semanas y nos vamos poniendo en forma. Así se evitarán lesiones y otros problemas. En segundo lugar, hay que forzar a que nuestros músculos, tendones y articulaciones ganen amplitud de movimiento y elasticidad. Esto se hace con ejercicios de estiramientos o stretching que hay que realizarlos de una forma absolutamente correcta para que tengan los resultados esperados. Hay que aplicar las reglas de oro de los estiramientos que son: estirar en una correcta posición corporal, mantener el estiramiento más de 20 segundos, no realizar rebotes, no olvidarse de respirar –y abdominalmente- mientras se realiza el ejercicio de estirar, llegar hasta el punto de molestia sin llegar a dolor. En tercer lugar, habría que limpiar nuestro organismo por lo que realizar un programa depurativo sería muy conveniente para eliminar toxinas de nuestros músculos y órganos depurativos. A no ser que nuestro médico de cabecera o especialista vea algún inconveniente, se pueden utilizar plantas como el cardo mariano, la alcachofera, el diente de león, el rábano negro, la bardana, los estigmas de maíz, el ortosifón, antioxidantes, etc. En cuarto lugar, hay que mejorar nuestra dieta con una alimentación mediterránea saludable, limpia y vivificante; así como evitar en lo posible tabaco, alcohol, café, etc. Las cuatro claves expresadas anteriormente hay que aplicarlas con constancia y paciencia. No sirve de nada realizarlo dos meses y volver a ser sedentario y no cuidar la alimentación otros siete años. También hay que tener en cuenta que nuestro cuerpo es un todo con nuestra mente, están estrechamente interrelacionadas, y que en muchas ocasiones una mayor rigidez física implica una mayor rigidez mental, y viceversa. Hablando metafóricamente, las personas a lo largo del paso de los años también se vuelven menos “flexibles” de pensamiento. Sus esquemas mentales o ideas se vuelven muy rígidos y también es un problema que tendría que solucionarse.
Hay que intentar mantener una elasticidad lo más cerca posible de cuando éramos bebés, y eso implica tanto nuestro cuerpo como nuestra mente.

Art. 200/373 (18-09-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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Aprovechando que la semana próxima los isleños Pitiusos contaremos con la excepcional visita y enseñanzas del Gran maestro Fu Sheng Yuan (actual Guardian del estilo Yang de Tai Chi), he creído oportuno profundizar para un mejor entendimiento de la milenaria disciplina del Tai Chi. Para ello, he vuelto a contar con la inestimable ayuda y asesoramiento de Juanjo Torres instructor de Tai Chi, Chi Kung y Kung-Fu y representante de las Artes Marciales Chinas FBK que imparte sus clases en los dojos Budoka.
Como recordarán, el Tai Chi es un arte milenario que tiene sus raíces en las artes marciales internas chinas, y que a la vez tiene efectos muy positivos para la salud tanto física como psicoemocional. Como resumen diremos que confiere fortaleza a los músculos a la vez que da flexibilidad a éstos y a las articulaciones, mejora la función cardiovascular, el sistema inmunológico y neuroendocrino; así como favorece la memoria, concentración y la relajación. Pero el Tai Chi no se limita únicamente a realizar una serie de movimientos estéticos y lentos de forma encadenada. Para realizar este sistema de una forma correcta, hay que tener en cuenta sus 10 principios fundamentales, inherentes a su práctica. Sin estos principios, las características y cualidades únicas que ofrece el ejercicio de esta disciplina china no se cumplen y deja de ser el verdadero Tai Chi para convertirse solamente en una mera tabla de ejercicios coreografiados. Muchas personas que practican esta gimnasia china desconocen, han olvidado o no le confieren la importancia que realmente se merece la aplicación de estos principios en cada momento del entrenamiento.
Estos 10 principios son los siguientes: 1) Mantener la cabeza erguida. El cuello debe estar en todo momento recto, relajado y con capacidad de movilidad para favorecer la correcta y fluida circulación de sangre y Qi (energía) al área de la cabeza. Con esto se consigue también mantener el espíritu atento, arraigado y fuerte, así como nutrir el orificio puro que confiere mejora en la concentración y memoria. 2) Mantener el pecho relajado y la espalda recta. En este punto el pecho no debe sobresalir, ¡no hay que sacar pecho en plan militar! A la vez la espalda no tiene que estar curvada sino recta pero relajada. Con ello se mejora la postura y la respiración. 3) Mantener flexible la cintura. La cintura es desde el lugar desde donde se dirigen los movimientos, por lo que no puede estar rígida sino flexible y móvil. De esta forma los movimientos tienen arraigo, fuerza y son más dinámicos. Estos tres primeros puntos tienen una estrecha relación con el aspecto más físico y posturológico de esta disciplina. 4) Distinguir entre lo sólido y vacío. Este punto está muy relacionado con el concepto de Yin – Yang y el movimiento con traslación de peso. La repartición del peso entre las piernas o pies ha de ser en todo momento que uno este en vacío (sin peso – Yin) mientras que el otro está en sólido (con peso – Yang). No se puede apoyar en sólido, sino que más bien siempre primero se apoya en vacío antes de realizar el paso. Al cambiar de peso se va de vacío a sólido. 5) Mantener relajados los hombros y los codos. Si existe tensión y rigidez en los hombros y codos la expresión de los movimientos y el Qi es menos fluida, dinámica y suave, es decir más bruta y forzada. Los codos tienen que estar apuntando hacia abajo, y no abiertos, a la vez que los hombros deben estar muy relajados. Este punto tiene relación con otro aspecto físico motriz. Todo ello es importante para que el movimiento sea como una ola de mar que va de los pies a las manos pasando por los hombros y los codos, dirigido por el abdomen; a la vez que permite que el Qi y la sangre fluya con facilidad formando un movimiento dinámico y suave pero con fuerza. 6) Utilizar la concentración de la mente para mover el cuerpo de forma inteligente. Este es un aspecto más mental (Shen). Tiene relación con trabajar desde una perspectiva de biomecánica correcta a la vez que este principio engloba a otros. Tiene que existir una armonía entre el aspecto externo e interno. El aspecto interno permite armonizar las mente y las emociones con el Qi centrándose en lo que se hace en eso momento. El aspecto externo permite mover las extremidades, el tronco y la cintura pero de forma unificada; formando parte de un engranaje, de un todo donde las diferentes piezas individuales tienen que funcionar perfectamente y trabajar en armonía para que surja un perfecto movimiento global. Cuando se consigue esto se logra que cada punto del cuerpo que se mueva se realice con “conciencia”, con intención. 7) Coordinar la parte alta y baja del cuerpo. Este también es un aspecto motriz. Todos los movimientos se inician en la parte baja –la raíz, los pies- y va ascendiendo hacia la cintura –que lo dirige- y se expresan en las manos. 8) Unificar lo externo y lo interno. La mente tiene que estar en estado de meditación, completa introspección, mientras que el cuerpo se esta moviendo y se enfoca hacia fuera. Hay que recordar que el Tai Chi es un arte marcial, por lo que no puede perder la perspectiva de la Guardia. Cuando se consigue que la mente esté en completa meditación mientras que el cuerpo está realizando un movimiento de forma perfecta y teniendo en cuenta los puntos anteriores se ha conseguido traspasar una gran barrera de evolutiva. 9) Buscar la continuidad y fluidez del movimiento. La forma está compuesta por 84 secuencias que equivalen aproximadamente a 20 minutos de práctica. Aunque esté formado por casi un centenar de secuencias se interpreta y practica como si fuera un solo movimiento, sin interrupciones. 10) Buscar la serenidad en el movimiento. El movimiento tiene que ser como las aguas de un río tranquilo, y la meta – actitud como una montaña fuerte y sólida.
Existen además, 3 preceptos esenciales que van más allá de los 10 principios y que son: 1) Relajación del cuerpo. Todos los movimientos que se efectúan tienen que realizarse de forma relajada. Las articulación nunca tienen que quedar extendidas o hiperextendidas, sino más bien redondeadas (semiflexionadas). Esto permite que se facilite la circulación de Qi y sangre (Xue), y que se nutran más correctamente zonas que en otras condiciones estarían mal sustentadas como es el caso de las articulaciones. Esto solo se consigue si se realizan los movimientos de forma muy relajada. Solo que exista un poco de tensión, ya no se consigue llegar a esa profundidad de nutrición, irrigación y trabajo. 2) Firmeza del Qi. Aquí hace referencia al término medio en la amplitud del movimiento. Si es muy abierto y con posiciones muy amplias, el Qi se dispersa. Si se trabaja muy cerrado y cerca del cuerpo, el Qi no puede fluir bien y se bloquea. Hay que buscar un término medio para focalizar y saber en todo momento donde se tiene el Qi. 3) Concentración de la mente. La meta es unificar lo externo y lo interno. Todos estos conceptos y preceptos tienen que ser aprendidos, practicados y asimilados para que el Tai Chi sea realmente Tai Chi. Aunque suelen irse explicando y actualizando conforme el alumno va aprendiendo la forma, perfeccionándose y evolucionando también es verdad que muchas personas no le confieren la importancia y dedicación dado el pensamiento cartesiano y a la ley del mínimo esfuerzo que caracterizan la mentalidad occidental.
El Tai Chi es armonía en movimiento, es meditación en movimiento. En breve, tendremos la oportunidad de iniciarnos o perfeccionarnos en esta disciplina y conocer de primera mano estos importantes principios y preceptos de la mano directa del gran Fu Sheng Yuan.

Art. 201/373 (25-09-2005) - Dominical, Mundo Natural (Diario de Ibiza)

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